Los trabajos previos a la elaboración del nuevo plan de movilidad de Oviedo ofrecen datos cuando menos curiosos. Así, por ejemplo, llama la atención el reparto por sexos del uso de los medios de transporte en la ciudad. Así, mientras que siete de cada diez de los viajeros de autobús son mujeres, siete de cada diez conductores de coches son hombres.
Según indicó el edil de Urbanismo Ignacio Fernández del Páramo, de estos trabajos previos a la definición de un protocolo de actuaciones ya se desprende que el objetivo fundamental del plan pasa por implantar un nuevo modelo de ciudad "menos dependiente del coche", cuyo uso, subrayó Del Páramo, es hoy "claramente excesivo". A este respecto, llamó la atención sobre el hecho de que la ocupación media de los vehículos sea de únicamente 1,36 personas de media, que algo más de la mitad de los automovilistas que circulan por las calles residen en la ciudad y que cogen el coche para realizar recorridos medios de dos kilómetros. Para Del Páramo, estamos ante un modelo de movilidad que "carece de lógica".
Además de la mejora del transporte urbano, los encuestados para la redacción del nuevo plan de movilidad han expresado su preocupación por el efecto barrera entre barrios que suponen infraestructuras de comunicación como la Ronda Sur, la autopista "Y" o, en el caso de Ciudad Naranco, las vías del ferrocarril. La necesidad de contar con carriles específicos para bicicletas es otra de las peticiones vecinales detectadas por la empresa encargada de redactar el nuevo plan.
Del Páramo anunció que su intención es convocar al resto de grupos políticos con representación en la Corporación a suscribir un pacto sobre la movilidad con una serie de puntos de consenso que no se vean afectados por los cambios que se puedan producir en el gobierno municipal. "En Vitoria, que es nuestro ejemplo de movilidad, se suscribió ese acuerdo y no veo por qué no se puede hacer aquí", subrayó.
