El nuevo Fernando Alonso podría salir de las instalaciones de la asociación Peñavera. El colectivo, con sede en la calle Muñoz Degraín, incluyó en su catálogo de cursos de este año un taller de construcción de prototipos de vehículo eléctrico. El objetivo de la iniciativa era iniciar a los pequeños en el mundo de la automovilismo, pero, sorprendentemente, los alumnos se alzaron en febrero con el título en la primera prueba oficial en la que participaron el pasado febrero en Bilbao.

La disciplina consiste en diseñar, construir y competir con un modelo de vehículo moldeado a gusto de los participantes. Los ovetenses adquirieron el vehículo y la batería por encargo en Reino Unido por unos 2.300 euros que todavía están financiando. "Lo pagan con su propio esfuerzo buscando patrocinadores y vendiendo lotería", indica el miembro de Peñavera Rafael Echevarría.

Los niños de entre ocho y doce años acuden cada viernes a aprender nociones de física y otras materias que aplican al coche. "Diseñan la aerodinámica y aprenden mucho", explica el profesor de electrónica Antonio Hernández, artífice junto a los pequeños del bólido con el que se impusieron a 38 equipos formados por 400 escolares vascos en su propio terreno el pasado mes de febrero.