La Real Cofradía del Silencio, con sede canónica en la iglesia parroquial de Santa María La Real de la Corte, es la única cofradía de Oviedo en la que los Reyes de España son hermanos mayores. Ésta es la historia. La Reina Leticia, cuando era pequeña, pertenecía a esta parroquia, ya que vivía en la calle General Elorza. Desde la cofradía le solicitaron que fuera camarera de honor del Flagelado, y a su marido, el actual Rey Felipe VI, abad de honor de la cofradía, cuando aún eran Príncipes de Asturias.
En la cofradía están muy orgullosos de que aceptaran estas distinciones cuando aún eran Príncipes de Asturias. Después, ya en lo alto de la Corona, les solicitaron el título de Real, que no tardaron en concederles. Y desde entonces Sus Majestades están invitados a participar en las procesiones, aunque en la Real Cofradía saben que por sus compromisos será muy difícil que los puedan acompañar. Incluso al darle la vara de mando al actual Rey, quisieron aprovechar la visita real a los Premios "Princesa de Asturias" para que la recogiera, pero siempre fue complicado porque la agenda siempre está completa. Así que decidieron enviar la vara por correo. Un año más están invitados por ser hermanos de honor, pero no se los espera.
La Real Cofradía del Silencio se diferencia del resto de las hermandades y cofradías por el recogimiento de sus actos procesionales. Además, la salida del templo del paso de la Virgen de la Amargura pone los pelos de punta a las personas que asisten por su gran dificultad.
La Real Cofradía tiene sus orígenes en la Cofradía del Silencio, que fue impulsada por parroquianos que mayoritariamente eran militares de la antigua Fábrica de Armas de la Vega. En el año 1945 empiezan a procesionar. En los años sesenta del pasado siglo, igual que el resto de las cofradías, dejan estos actos y aparecen de nuevo en el año 2001.
