Fue tan rápido que nadie se enteró. Un hombre de unos 50 años vestido completamente de negro entró ayer a la una y media de la tarde en la sucursal del Banco Sabadell situada en la esquina de las calles San Melchor y Fernando Alonso, en el barrio de Santo Domingo. Le dijo al cajero el clásico "Dame todo lo que tengas" y le amenazó con una pistola. La Policía, con el testimonio del cajero y otras dos empleadas del banco, no ha podido determinar si se trataba de un arma real o simulada.
El banco estaba a media hora de cerrar para un largo puente y el cajero le entregó al atracador "alrededor de 2.000 euros", según fuentes policiales. El hombre salió de la sucursal bancaria y se subió en un coche que estaba aparcado en la calle Fernando Alonso. Se desconoce si en el vehículo había un compinche o el atracador actuó en solitario.
El hombre vestía chaqueta, pantalón, zapatos y gorra negros y nadie se percató de que había entrado en el banco. El responsable de un comercio colindante solo vio cómo llegaba un coche de la Policía Nacional y se bajaban dos agentes. "No me enteré de nada, aparcaron aquí delante y fueron hacia el banco, pensé que iban a sacar dinero o hacer alguna gestión personal", explicó mientras miembros de la Policía científica aún inspeccionaban la sucursal bancaria.
En el bar que está en la esquina de enfrente del banco tampoco se enteraron de nada. El responsable del local sí que recibió un aviso: "Nos dijeron que habían atracado el banco a punta de pistola y que estuviésemos alerta y tuviésemos cuidado si veíamos a un hombre vestido de negro", pero nada más.
La Policía, tanto la Nacional como la Local, sigue buscando al asaltante tras tomar huellas en la sucursal bancaria y analizar las imágenes de la cámara de seguridad.
Los tres empleados que estaban trabajando en el momento del atraco abandonaron el banco pasadas las tres de la tarde, una hora y media después del suceso y casi una hora después del horario de cierre. "Estoy bien", es lo único que dijo el cajero. Ninguno de los tres trabajadores quiso dar más explicaciones.
El atraco se produce a los nueve días de otro similar en Colloto en el que el ladrón se había llevado 5.000 euros. Esa misma sucursal había sufrido otro robo a punta de pistola poco antes, por lo que, con el de ayer, son ya tres los atracos en Oviedo en los últimos dos meses. En el del pasado día 19, a las nueve de la mañana, poco después de la apertura, un hombre atracó la sucursal de Liberbank de la calle Camín Real de Colloto. El atracador, de unos 40 años y 1,60 metros de estatura, entró en la entidad con el rostro tapado. Según la Policía, esgrimió lo que aparentaba ser una pistola, aunque, al igual que en el asalto de ayer, se desconoce si el arma era real o simulada. A la hora del atraco, se encontraban en el interior del mismo dos empleadas y la directora de la sucursal.
El hombre amenazó a las empleadas con usar la pistola si no le entregaban el dinero y finalmente abandonó la entidad con unos 5.000 euros. Quizás esperaba encontrar más dinero al ser víspera de cobro para los jubilados y pensionistas. Al igual que ocurrió ayer en el asalto al Sabadell de la calle Fernando Alonso de Oviedo, se puso en marcha una "operación jaula" para tratar de atrapar al asaltante.
