"Perplejos e indignados". Así se sienten en la Junta de Hermandades y Cofradías de Semana Santa de Oviedo tras las manifestación del concejal de Economía, Rubén Rosón, en las que aseguraba haber propuesto una reunión para tratar asuntos relativos a la Semana Santa en la ciudad de la que no tuvo respuesta. "Quiero desmentir totalmente que Rosón tratara de ponerse en contacto con la Junta de Hermandades. No oímos ni un rumor, ni recibimos una carta, ni siquiera una llamada de teléfono indicándonos que quisiera ponerse en contacto con nosotros. Estamos un tanto indignados", manifestó ayer el presidente de la Junta de Hermandades y Cofradías de Semana Santa de Oviedo, José Salinas Hernández, que pronto convocará una reunión con todas las cofradías para tratar sobre la relación con el Ayuntamiento.

El edil de Somos también había anunciado su intención de mejorar en próximas ediciones la promoción de los actos de la Semana Santa en la ciudad, que, en esta última edición, no contaron con más apoyo municipal que el relacionado con la logística para el desarrollo de las procesiones por las calles. José Salinas repasa las carencias que encuentran a la hora de organizar la Semana Santa: "Necesitamos todo tipo de ayudas, empezando por las económicas e institucionales, pero hasta ahora el concejal sólo nos ofrece la logística, y no creo además que se pueda oponer a ello, porque nosotros siempre lo solicitamos legalmente y con los informes previos de todos los recorridos de las distintas procesiones".

El año próximo será la 25.ª ocasión en que se celebre la Semana Santa en Oviedo desde la recuperación de las procesiones, que comenzaron con la Cofradía del Nazareno y ahora, un cuarto de siglo después, mueven a miles de personas en la ciudad. La Junta de Hermandades pretende celebrar la efeméride a lo grande, para lo que consideran que la ayuda del Ayuntamiento resulta fundamental, especialmente en el apartado de la promoción, un apoyo que el gobierno tripartito no ha brindado a las cofradías hasta la fecha.

La oposición municipal, PP y Ciudadanos, se ha posicionado a favor de la celebración de la Semana Santa y ha criticado el sectarismo y el componente ideológico del tripartito y el daño que causan al turismo en la ciudad.