El "violador del portal", un vecino de San Claudio acusado de agredir sexualmente a una joven y tocar los genitales a dos menores a la entrada de sus casas en 2016, admitió ayer ante la sala segunda de la Audiencia Provincial haber penetrado a la mujer de 28 años "sin violencia", pero negó haber abusado de las niñas, de 12 y14 años, a las que sí reconoció haber seguido hasta el portal a la vuelta de la escuela.

El hombre declaró ante las preguntas del fiscal y los abogados de las partes que la mujer a la que supuestamente violó en la madrugada del 24 de abril de 2016 "iba bebida y no se negó" a que la penetrase. Reconoció haberse aprovechado de la chica, pero defendió que en ningún momento fue violento con ella. "No es cierto que la agarrase con fuerza del cuello, sino que la agarré con suavidad de la cintura y no se apartó", declaró ante la sala.

Sobre los abusos a dos menores que tuvieron lugar al mediodía del 13 de octubre y el 29 de noviembre del mismo año, el procesado admitió haber seguido a las niñas hasta el portal de su casa. El acusado es sabedor de la existencia de grabaciones de cámaras de seguridad en las que se le ve entrando tras ellas y por ello reconoció que las siguió, pero negó que llegara a tocarles los genitales. Según el informe de acusación del fiscal, el varón utilizó como excusa en ambos casos diferentes lesiones para pedirles como favor a las niñas que le ataran los cordones. Una se negó, pero aun así trató de besarla y le metió mano bajo la ropa interior. La otra, de 12 años, accedió y él aprovechó su despiste para meterle la mano bajo la falda antes de huir.

La abogada de la acusación particular, Ana María González, atribuye las declaraciones del acusado a un cambio de estrategia. "Al principio negaba todo, pero tras saber que está pillado por grabaciones ha cambiado el relato", declara la letrada, que califica el caso de su defendida, la mujer adulta, "una violación de libro", probada por distintas pruebas. "La penetró hasta en dos ocasiones, primero lo intentó con el pene y luego lo hizo con los dedos", explica.

La vista, en la que las tres supuestas víctimas ratificaron su versión ante la sala, quedó aplazada hasta esta mañana a las 10,15 horas. En la misma está previsto que declaren los forenses, miembros de un equipo psicosocial y personal encargado de las pruebas del ADN.

El fiscal solicita para el acusado una pena de 18 años de cárcel, así como una indemnización de 10.000 euros para la mujer agredida y 4.000 euros para cada una de las menores que sufrieron abusos. De la pena solicitada, diez años de prisión corresponden a la violación a los que hay que sumar cuatro por cada uno de los casos de abuso sexual a las niñas.