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El servicio de serenos costará 15 euros al mes a los comercios

Los "cuidadores de barrio" empezarán a funcionar este año en el centro, la Argañosa, Ciudad Naranco y Pumarín

El servicio de serenos costará 15 euros al mes a los comercios

La Argañosa, La Corredoria, Ciudad Naranco, Pumarín y las calles del eje comercial del centro, incluyendo el casco antiguo. Estas serán las primeras zonas de la ciudad que contarán con los serenos nocturnos que pretende implantar a finales de este año el Ayuntamiento de Oviedo, con un precio de abono al servicio de 15 euros para los negocios y de 1,50 euros al mes para las comunidades de vecinos. En todo caso, fuentes de la Concejalía de Empleo, dirigida por Rubén Rosón (Somos), precisan que estos "cuidadores de barrio" podrían desplegarse en el futuro por otras áreas de Oviedo, en caso de que se detecte demanda suficiente para ello, algo que ya se ha constatado en las zonas seleccionadas inicialmente tras la realización de unas seiscientas encuestas por parte de una empresa especializada.

El tripartito ha encargado el estudio para la implantación de los serenos a la Agrupación de Sociedades Asturianas de Trabajo Asociado y Economía Social (Asata), de la que forma parte la empresa de los serenos de Gijón, donde este servicio está activo desde 1999 y ha logrado un notable reconocimiento por parte de la ciudadanía. El informe definitivo, según indican fuentes municipales, estará listo en junio y no será hasta entonces cuando se conozca el número exacto de serenos que se desplegarán por las calles de la capital en las que arrancará el plan, aunque la previsión es que la plantilla no supere inicialmente las veinte personas, con un coste global que rondará el medio millón de euros.

La selección de los trabajadores se realizará a partir de unos cursillos de 200 horas que llevará a cabo Asata y de los que saldrá una bolsa de empleo. Las contrataciones se harán con "criterios sociales", según las fuentes municipales consultadas. De esta forma, tendrán prioridad, por ejemplo, los parados de larga duración, las mujeres solas con hijos a su cargo o personas en riesgo de exclusión social.

Ante las críticas que esta iniciativa ha generado en la asociación de vigilantes privados, Rubén Rosón subraya que la figura que se va a implantar en las calles de Oviedo es la de "cuidadores de barrio". "No se trata de vigilancia ni de seguridad; estamos hablando de un servicio de atención a los ciudadanos y los comerciantes de nuestra ciudad", sostiene el edil de Somos.

Los serenos del siglo XXI también están ya presentes, además de en Gijón, en otras ciudades españolas como Vigo, Murcia, Vitoria, Torrelavega o Baracaldo. Los servicios que prestan van mucho más allá de los tradicionales de una profesión que había desaparecido de las calles del país, pero que regresa adaptada a las necesidades de las urbes de este tiempo. Así, por ejemplo, los de Oviedo harán labores de control para evitar que se hagan pintadas en las paredes del casco antiguo.

En lo que se refiere a los servicios a la ciudadanía, los serenos o "cuidadores de barrio", como los denomina el tripartito, centran su actividad en ayudar a personas, familias o colectivos con dificultades, el auxilio a transeúntes o el control de los vehículos estacionados en la calle. Además, uno de los servicios que más está creciendo, tras sucesos como el asesinato de Diana Quer o el de "la Manada" en San Fermín, es el acompañamiento nocturno a mujeres que regresan a casa tras salir de fiesta los fines de semana.

Los comerciantes que se abonen a los serenos tendrán un control periódico durante toda la noche de las puertas, luces, ventanas y escaparates de sus negocios, con avisos inmediatos a la policía si se produce algún motivo de alarma. Además, los "cuidadores de barrio" prestarán información a los turistas sobre restaurantes, bares, farmacias, hoteles, comercios o rutas de interés del barrio en que se encuentren. Por lo que se refiere a las comunidades de vecinos, los serenos se encargarán de revisar portales, comprar medicamentos en farmacias de guardia o acompañar a las personas mayores a bajar la basura.

En principio, los serenos de Oviedo realizarían diferentes rutas por las calles a su cargo desde las once de la noche hasta las siete de la mañana. El estudio que se está elaborando determinará los itinerarios y el número de personas asignadas a cada barrio, pero ya se sabe, por ejemplo, que recorrerán 23,39 kilómetros por las calles de La Argañosa, 28 kilómetros por Ciudad Naranco y otros 28 kilómetros por Pumarín, en el caso de que todas las vías de esas zonas se sumen a la iniciativa.

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