José A. ORDÓÑEZ
El Ayuntamiento de Oviedo aprovechará el plan para la construcción de seis nuevos parques caninos en diversos barrios de la ciudad para mejorar el que ya está activo en el Campo San Francisco. Y es que, a juicio de los técnicos que han redactado el proyecto para esta actuación, el cierre del recinto para perros del gran "pulmón verde" del centro "no cumple con las condiciones mínimas de seguridad". En concreto, el proyecto municipal plantea la sustitución del cerramiento perimetral de malla simple que hay ahora por otro más consistente, elaborado con malla electrosoldada. Además, el espacio canino del Campo, que mantendrá sus 1.275,27 metros cuadrados de superficie, pasará a contar con dos puertas de acceso, dispensadores de bolsas para la recogida de excrementos de animales y carteles en los que se detallarán las reglas para un buen uso del parque.
En cuanto a los nuevos parques caninos previstos, cuya construcción arrancará este año con un presupuesto cercano a los 100.000 euros, destaca el que está proyectado para el barrio del Milán. Medirá 1.141 metros cuadrados y ocupará una franja de espacio verde próxima a la calle Luis Braille. Por razones estéticas, no estará cerrado con vallas metálicas, sino que contará con una serie de hitos metálicos que delimitarán su perímetro.
El recinto canino de la Monxina se habilitará sobre una superficie de 713,13 metros del parque Enrique Quirós, al este del campo de fútbol de Matalablima. El espacio para perros de Buenavista está previsto para una zona interior del parque Juan Mata, adosada a un paseo de aglomerado asfáltico, y dispondrá de 430,16 metros, mientras que el de Vallobín irá en el parque Ángel González, con unas dimensiones de 295,63 metros cuadrado.
El parque Tuero Bertrand albergará el espacio canino del barrio de Montecerrao, de 586 metros cuadrados, mientras que el de Vetusta está proyectado para el parque del mismo nombre.
