Vecinos de La Corredoria indignados con la acumulación de basura en los parques del barrio reclamaron ayer mayor vigilancia de las zonas verdes y la imposición de multas para acabar con lo que ven un hábito perjudicial para la imagen de esta zona de la ciudad.
Algunos residentes critican la creciente costumbre de algunas personas de hacer celebraciones en las zonas verdes y dejar allí todos los residuos generados. "La gente come y bebe en los prados, pero no recogen la basura y eso no puede ser", indica la vecina Naranco Cueto.
Las quejas van más allá y apuntan a dueños irresponsables de perros cuyos excrementos quedan por los suelos. "No se te ocurra llamarles la atención porque sólo sirve para generar discusiones", indican sobre la negativa de muchos propietarios a recoger los excrementos de sus mascotas.
Más civismo
Por ello reclaman la aplicación más rigurosa de las ordenanzas municipales. Creen que en otras zonas de la ciudad se es más exigente con el cumplimiento "a rajatabla" de las normas y eso se traduce en parques más limpios y adecuados para el disfrute de todos. "Es la única forma de imprimir un poco de civismo", indica la propia Cueto.
