La Balesquida traspasa fronteras. Las de Siero hace tiempo. Decenas de jóvenes -y no tanto- eligieron ayer el parque de La Cebera de Lugones para disfrutar del ya apropiado Martes de Campo. Con amigos o en familia -daba igual- los asistentes disfrutaron de la soleada jornada aprovechando la sombra de los muchos árboles del "pulmón del centro de Asturias". La de ayer fue la primera edición de la comida campestre desde la prohibición de hacer barbacoas en el bosque urbano. Si bien la mayoría respetó la nueva norma, hubo alguno -despistado o no- que se la saltó a la torera. Afortunadamente fueron los menos. Tras tanto movimiento festivo, está previsto que desde primera hora de hoy los servicios municipales limpien la finca. A. F. V.