Un gran mercado solidario inundó ayer de escolares el paseo de Los Álamos del Campo de San Francisco. Unos 900 niños procedentes de 39 cooperativas formadas en colegios e institutos de toda la región tomaron parte de una iniciativa celebrada con un doble objetivo: despertar el espíritu emprendedor desde las aulas y financiar causas benéficas de varias ONG en distintos puntos del mundo.
Los pequeños no dieron tregua a las miles de personas que pasaron por la zona para dar salida a su stock de productos de todo tipo. "Cómpreme algo porque no lo va a encontrar a mejor precio", indicaba un alumno del colegio Amor Misericordioso de Colloto, ofreciendo distintos tipos de bisutería y elementos de decoración de fabricación casera.
La oferta incluyó varios objetos intercambiados con centros escolares de otros puntos de España y Europa. Es el caso de los alumnos del colegio de La Inmaculada de Oviedo, que entre otras cosas vendieron horchata proveniente de otro colegio de Elche con el objetivo de obtener dinero para financiar un proyecto solidario en Perú. "Ya sacamos más de 50 euros", confesaba el alumno Iván Medina.
Las ventas también fueron abundantes para el IES Alfonso II. Su cooperativa multicultural, con alumnos originarios de distinto países, vendió una especie de patatas fritas para contribuir a dos causas justas. "Los beneficios irán para la asociación Galbán y la ONG cauce", adelantó la profesora Soledad Collado.
