Jorge Luis Rodríguez y su equipo iban a quedarse solo una semana en Panamá por motivos laborales y acabaron alargando la estancia todo un año. Él, y la compañía de la que es director técnico, Vectio, llevaron a cabo un estudio sobre el transporte urbano de aquella capital centroamericana. "Fue un proyecto muy chulo", resume Rodríguez. El Gobierno local iba a hacer obras en el metro y necesitaba una reordenación completa del tráfico, que evitara atascos interminables. Un plan de desvíos. Así que la compañía ovetense tuvo que ponerse manos a la obra. Entre sus logros figura haber sido los autores de la planificación e implementación del primer carril bus de todo Centroamérica, precisamente en Panamá. Y funcionó. "Está en uso y el bus urbano tarda ahora solo diez minutos en un trayecto para el que los coches echan más de una hora por culpa de los atascos. Y estamos logrando un trasvase, en esos países el coche es un símbolo de estatus social, pero estamos logrando que gente de renta media viaje en transporte público", asegura.
Vectio nació en el polígono de Olloniego-Tudela allá por 2007, aunque dos años después se desplazó al centro de Oviedo a la zona de la Ruta de los Vinos para finalmente acabar justo en el centro de la ciudad, en plena calle Uría. Hasta la propia ubicación de la empresa está relacionado con el trabajo que hacen. "Vinimos aquí para que la gente pudiera desplazarse en transporte público y tuviera las estaciones de tren y de autobús cerca", señala Rodríguez. Ahora, además de en Oviedo, tienen oficinas en Madrid, Reino Unido y en América Latina. Prácticamente toda su facturación llega desde fuera de España. Suman ya 27 trabajadores. Entre los hitos personales de Jorge Luis Rodríguez, está el de haber recibido hace seis años el premio de ingeniero del año, que concede Caja Rural, por su proyección de futuro. Los logros colectivos los van marcando con una especie de chincheta en un mapa virtual que exhiben en cada presentación. Son sus proyectos. Han estado por medio mundo. Sin exagerar.
Se definen como una consultora de tráfico y transporte. Lo que dicho así de sopetón cuesta digerir. "Somos ingenieros de caminos, economistas, arquitectos. No somos proyectistas, sino que nos dedicamos a la planificación, una tarea muy escasa por aquí, pero en otros países el sector privado sí que está más involucrado en la planificación de infraestructuras. Antes de hacer una obra como pueda ser la Ronda Norte hay muchos estudios previos", asegura, "nosotros hacemos estudios de movilidad que pueden servir, por ejemplo, para conocer si la gente de un determinad lugar, por las mañana, va a trabajar caminando, en bicicleta, en autobús o en el coche".
En Asturias, y más en concreto en Oviedo, hay bastantes ejemplos de equipamientos o infraestructuras que podrían considerarse puntos negros, que no tuvieron antes uno de esos estudios de movilidad más holístico, más globales. Se ve mejor con un ejemplo. "El HUCA no tuvo planificación de transportes porque solo puedes llegar por carretera cuando está ahí la Renfe, la Feve...", asegura.
"La mayoría de nuestros clientes son inversores de concesiones", explica. Otra afirmación que se ve mejor con un ejemplo. Más digestivo. "Imagina que la autopista del Huerna cambia de manos, ¿cuánto vale esa carretera? El valor se calcula en función del número de coches que pasen ahora y en el futuro", señala. Los del presente son, más o menos fáciles de calcular, los del futuro son harina de otro costal. "Se prevé que la circulación estará afectada por la variante de Pajares, con lo cual hay que hacer un estudio en el que se incluyan todos los modos de transporte", asegura. También trabajan mucho para la administración pública. Son los responsables de los estudios de movilidad de grandes desarrollos arquitectónicos nacionales como la ciudad de Justicia de Madrid o el Centro Canalejas, un gran complejo hotelero, comercial y residencial en pleno corazón de la capital de España. "Al final siempre hacemos los mismos análisis, pero pueden ser para un mega centro comercial o una línea de transporte", señala. Otro punto negro. "Por ejemplo, en Parque Principado, si se hubiera hecho bien, debería haberse previsto cuánta gente va a ir, desde dónde y cómo van a ir. Y así se habrían podido prever los atascos que hay y tomar medidas", señala. La anticipación es la clave.
Otro ejemplo. Lejos de España, pero que ilustra su forma de trabajar. Rodríguez proyecta en una pantalla de una sala de reuniones de su compañía imágenes de una glorieta de Santo Domingo, en la República Dominicana. Es un ir y venir de coches, autobuses y taxis. "Con cámaras instaladas por nosotros o que estén disponibles para la vigilancia, analizamos la situación. En este caso contamos cuántos vehículos entraban en la ciudad, lo procesamos y lo llevamos a un modelo de simulación", asegura. A partir de ahí proponen mejoras. En ese caso concreto, sugirieron la instalación de un paso inferior por la glorieta y extender la línea de tranvía. Funcionó. Otro. Acaban de finalizar un proyecto en África para desplegar una red de semáforos.
Rodríguez vuelve a definir su trabajo. "Somos ingenieros de caminos, pero un poco raros".
