El Oviedo tiene muchas cosas que celebrar, y son numerosas las iniciativas que el club ha puesto en marcha en las últimas semanas para conmemorar sus noventa años de vida. Si en lo deportivo estas últimas semanas no están siendo muy favorables, en lo institucional todo va "viento en popa". El club quiere que este cumpleaños del Oviedo sea especial y por eso, además de una camiseta, también habrá un escudo conmemorativo. Un guiño evidente al pasado, ya que este emblema, elaborado en tonos azules, blancos y negros, incluye una referencia al Stadium Club Ovetense y al Club Deportivo Oviedo, las dos entidades que al fusionarse en 1926 dieron origen al Real Oviedo.

A estas iniciativas oviedistas se les debe unir la escultura de Bruno Prieto situada el pasado mes de enero en la calle Gil de Jaz, justo el lugar en el que se firmó el acta de fundación de la entidad azul. Una escultura que consta de veintiséis círculos de bronce macizo y que está sujetada por una base de un granito especial, con los colores del Oviedo. El autor señaló que en esta obra había tratado de realizar "una metáfora del equipo, representado por las veintiséis secciones cilíndricas, que están tan unidas como una sola pieza, pero que siguen siendo veintiséis piezas. Se trata de un elemento vivo, igual que lo es el Oviedo dentro de la ciudad".

El alcalde de la ciudad, Wenceslao López, también se mostró encantado con la escultura. "Esto supone tener un punto de referencia en Oviedo, de donde nació el club, un lugar que representa también que ha habido muchas generaciones de hombres y mujeres que han llevado en su corazón el oviedismo y que han luchado mucho, han sido felices y se han disgustado mucho con el equipo", señaló.