El Oviedo se estrenó esta pretemporada con un partido de acoplamiento, ante un rival que no le exigió demasiado pero que sí le sirvió para ir cogiendo ritmo. De eso se trata. El equipo de Egea tiene algo ganado con respecto a otros inicios: mantiene al entrenador y a una base de jugadores que hacen que cualquier adaptación sea más rápida. Y así, en el inicio del partido, con un once inicial muy similar al más habitual la pasada temporada, se pudieron reconocer detalles del Oviedo que logró el ascenso y ser campeón de Segunda B. En esta primera prueba se vio a un Erice con un buen tono físico y que sigue siendo el futbolista que pone el ritmo e inicia el juego azul.

Tras unos instantes iniciales de tanteo, pronto el Oviedo cogió el mando. La superioridad de los azules en el campo fue palpable. En el primer periodo las señas de identidad del Oviedo fueron las mismas de la temporada pasada. Y es que, salvo el central Torrent, el resto ya estaban. La única diferencia con el once tipo del ascenso fue ver a Vila colocado junto a Erice en el doble pivote y a Diegui, que sustituyó al ausente Nacho López en el lateral derecho.

Y como en la temporada pasada el peso del juego azul recayó sobre Erice, Susaeta, Borja Valle y Héctor Font. A Linares se le vio luchador pero tuvo pocas ocasiones de marcar. La mayor parte del fútbol del Oviedo pasó por la banda derecha, por donde Diegui trató en varias ocasiones de aprovechar el espacio en ataque que le dejaba Susaeta cuando se colocaba de interior. De ahí surgieron algunas de las ocasiones de gol que tuvo el equipo de Sergio Egea. Se vio muy bien a Susaeta, el jugador que quizás más entró en contacto con el balón en todo el primer periodo. También Borja Valle dio la sensación de estar rápido e incisivo. Una buena acción entre ambos en el minuto 16 supuso la primera acción de peligro del Oviedo, que concluyó con un disparo del extremo vasco que detuvo Zabal.

A punto estuvo de llegar el primer tanto azul en el minuto 22, en una incorporación al ataque de Diegui, que logró poner el balón en buenas condiciones en el centro del área, pero un defensa del combinado AFE impidió a Héctor Font rematar con precisión. No tardaría mucho en llegar el primer tanto del Oviedo y fue precisamente Héctor Font el autor. Un centro de Borja Valle lo aprovechó el castellonense para marcar un gol de cabeza, una faceta poco habitual para este centrocampista.

Poco le duraría al Oviedo la alegría de ir por delante en el marcador. Un penalti señalado a Erice sirvió al delantero del combinado AFE Collado para empatar el choque. Bajo palos estaba Gorka Magunazelaia, que sustituyó a Esteban poco después de la media hora de juego.

En la continuación cambiaron las alineaciones y también el partido. El control del Oviedo aumentó en un choque que se volvió algo anárquico. Se estrenaron en la defensa azul tres de los nuevos fichajes: Peña pasó a ocupar el lateral izquierdo y Hervés, por la derecha, y Borja Gómez, por la izquierda, formaron la pareja de centrales. Pocas conclusiones se pudieron sacar de sus actuaciones. Y es que el combinado AFE les exigió muy poco. Lo mismo le pasó a Rubén Miño, el nuevo portero azul que entró en el minuto 60 por Gorka.

Más oportunidades tuvieron para reivindicarse los hombres de ataque, sobre todo los jugadores del filial que están haciendo la pretemporada con el primer equipo. Allyson consiguió un gol, pero el que quizá sorprendió más fue el extremo derecho Lucas, que desbordó con habilidad y velocidad por su banda generando bastante peligro. De una acción suya llegó el segundo tanto del Oviedo, obra de Borja Valle, que sólo tuvo que rematar el gran pase que le dio el canterano.

Al principio de la segunda parte el dibujo varió poco. Se mantuvo el doble pivote, ahora con Erice y Omgba, y con Borja Valle de mediapunta en lugar de Héctor Font. Pero tras la entrada de David González el equipo pasó a jugar con dos puntas. De cualquier forma, el dominio azul fue tan claro que poco importaron las posiciones y las tácticas. Otro que volvió a demostrar que tiene mucho futuro es Rivera. El juvenil entró por Erice y volvió a dejar buenos detalles.

El tercer tanto del Oviedo lo consiguió Allyson de cabeza tras un córner. Cervero, que dejó buenos detalles cuando jugó de espaldas a la portería y se permitió un taconazo de clase, aumentó la renta al transformar un penalti cometido sobre Omgba. La lucha y la entrega del delantero del filial David González también merecieron el premio del gol.

El Oviedo cerró ayer las oficinas del club con 5.957 abonados. Una cifra de la que 1.233 son nuevos socios. El club ha alcanzado esta cifra cuando tan solo van cuatro días desde que comenzó la campaña. La taquilla del Tartiere y el punto de atención al abonado que hay en la tienda del club abrirán de nuevo hoy.