El Oviedo se clasificó para la tercera eliminatoria de la Copa del Rey al imponerse anoche al Valladolid por 2-1. Los azules fueron superiores a los pucelanos en juego y ocasiones, pero acabaron sufriendo en exceso cuando lo tenían todo a favor.
La clave del partido estuvo en el minuto 51. Un penalti de Juanpe sobre Toché sirvió a los azules para abrir el marcador en una acción en la que, además, fue expulsado el defensor pucelano. Y solo tres minutos después los azules ampliaban su ventaja con un gol de Hervías. Sin embargo, el Valladolid reaccionó. Alfaro acortó distancias en el minuto 71 y seis después Juan Villar tuvo la ocasión de empatar en un remate de cabeza que se fue alto.
Los dos equipos optaron por dar una vuelta radical al once que viene jugando en la Liga. Prueba de ello es que en el Oviedo sólo repitieron en el equipo titular dos jugadores -Borja Gómez y Hervías-, respecto al equipo que ganó el domingo al Albacete, mientras que en el Valladolid el único que mantuvo la titularidad del once inicial que jugó y perdió en Ponferrada fue Juanpe.
En la primera mitad, salvo los minutos iniciales, el Oviedo estuvo mejor que el Valladolid. Los azules tuvieron más el control del juego y, además, movieron el balón con criterio en muchas fases, con profundidad por ambas bandas en las que Hervías y Aguirre dieron movilidad y recursos a un equipo al que solo le faltó acertar con el último pase para tener opciones de desequilibrar el marcador.
Los pucelanos fueron los primeros que generaron una situación de peligro con un disparo de Diego Rubio que salió fuera, en el minuto 3, pero a partir de ahí fue el Oviedo el que además de tener la posesión pasó a controlar los tiempos del partido.
Omgba, en dos ocasiones con dos disparos desde fuera del área, junto con Hervías y Aguirre fueron los que generaron las mejores opciones ofensivas de un Oviedo que no sólo estaba acertado con el balón si no que apenas concedió ocasiones en defensa. Los azules anularon todos los intentos de los pucelanos, que apenas se acercaron con peligro a la portería defendida por Miño que jugaba su primer partido oficial con los azules. Un disparo de Rodri desde fuera del área, que salió desviado, fue la única aportación ofensiva de un Valladolid al que le costaba en exceso aproximarse con peligro a las inmediaciones del área oviedista.
La segunda mitad comenzó con la misma tónica, aunque fue el Valladolid el que generó la primera ocasión en un remate de cabeza de Alfaro que detuvo bien Miño.
Sin embargo el Oviedo volvió a tomar el mando del partido y en la primera ocasión que generó se adelantó en el marcador. Un disparo desde fuera del área de Bautista fue rechazado por un defensor pucelano y cuando iba a rematar Toché fue arrollado por Juanpe. El árbitro señaló penalti y la expulsión del defensa, siendo el propio Toché el que transformó la pena máxima.
Sólo tres minutos después el Oviedo iba a encarrilar el partido y la eliminatoria con un disparo de Hervías que sorprendió a Kepa
Con el 2-0 y la superioridad númerica el Oviedo acentuó su control del juego ante un rival que intentó estirarse y consiguió acortar distancias por mediación de Alfaro cuando quedaban todavía 19 minutos para el final.
El gol metió al Valladolid en el partido y Juan Villar pudo lograr el empate en un claro remate de cabeza que envió alto.
No hubo más y así llegó al final con un triunfo que le da el Oviedo el pase a la tercera eliminatoria.
