Para el Mallorca, el partido del domingo en el Carlos Tartiere tiene una trascendencia enorme. Parece desmedido hablar de una final a estas alturas de temporada, jornada 6, pero el resultado cosechado en Oviedo puede tener consecuencias directas sobre la continuidad del discutido Ferrer al frente del equipo bermellón. Los futbolistas son conscientes de la importancia del reto. "Daremos la vuelta a la situación. El culpable es el equipo y no el entrenador. Ferrer nos anima y confía y nosotros", aseguró ayer Moutinho en rueda de prensa.

El futbolista bermellón sabe de la dificultad del partido del domingo. "El Oviedo es un recién ascendido pero no tengo dudas de que será muy complicado. No nos van a regalar nada", indicó el centrocampista. "Los resultados no son los esperados pero no queda otra que seguir trabajando para darle la vuelta a la situación", añadió el futbolista en la sala de prensa.