Valladolid, José PALACIO, enviado especial de

LA NUEVA ESPAÑA

El delantero del Oviedo Linares vio la segunda tarjeta amarilla cuando se encontraba en el banquillo, por lo que fue expulsado y se perderá el partido del próximo sábado ante el Alcorcón, encuentro que se disputará en el Carlos Tartiere a las 18,00 horas.

Linares recibió la primera amonestación en el minuto 63 por derribar a un jugador del Valladolid. Posteriormente, fue sustituido por Koné, y en el minuto 80, cuando se encontraba en el banquillo recibió la segunda tarjeta, según reflejó el árbitro en el acta "por protestar de forma ostensible, levantando los brazos, una de mis decisiones".

Al respecto, Sergio Egea señaló que no sabía lo que había ocurrido porque estaba pendiente del juego, e indicó que "es una pérdida importante para el equipo".

Por otra parte, el árbitro reflejó en el acta que el delegado del Oviedo, Santiago Menéndez, le comunicó una hora antes del partido un robo que afectaba exclusivamente a las equipaciones de los porteros y que únicamente disponía del color naranja, que coincidía con el de los guardametas locales. Al no tener otras opciones disponibles, el árbitro decidió que jugasen con esa indumentaria reflejando la incidencia.

Por su parte, el entrenador del Valladolid, Garitano fue claro en su análisis. "Es una derrota dolorosa, tuvimos mucha inseguridad defensiva y mucha ansiedad con el balón".