Ovetense, oviedista y canterano, Nacho López presenta el currículum perfecto para disfrutar del momento. Con su equipo de vuelta en el fútbol profesional, al lateral le faltaba un último detalle para que la felicidad fuera completa. José Fernández, experiencia en la categoría, había llegado el último verano a Oviedo y la plaza para el lateral derecho estaba más cara que nunca. Nacho López apenas se inmutó. Siguió trabajando en El Requexón en busca de su ocasión. Para los defensas, la espera suele ser más dura que en otras zonas del campo. La oportunidad llegó en Valladolid. El último en estrenarse gozaba de su momento.
"Estoy feliz por el debut pero más aún con la victoria del equipo", recita el asturiano siguiendo al pie de la letra el manual del debutante. "Mi debut es fruto de todo el trabajo de estos años", añade. Y no le falta razón. El camino de Nacho López al primer equipo ha estado lleno de obstáculos. En Oviedo, en los últimos años, el camino de canteranos al primer equipo es más empinado de lo normal.
Por eso el éxito de Nacho López con la zamarra azul se tuvo que producir en dos actos. No logró cuajar a la primera, por lo que se buscó su sitio en otras plazas. En Mieres llamó la atención lo suficiente como para tener una segunda oportunidad, pero el Oviedo no se decidió a dar el paso. Después de salirse en Avilés no había dudas: Nacho López tenía el nivel exigido para jugar en el club azul.
Y el carril derecho fue suyo sin ninguna duda. La temporada pasada, la del ascenso, el asturiano disputó 30 partidos, 29 como titular. Un año redondo. El domingo le tocó disputar sus primeros minutos en Liga después de limitar su actuación a la Copa del Rey. Egea decidió darle la alternativa en el lateral en lugar de Fernández, indiscutible hasta la fecha.
Nacho López estuvo bien desde el primer minuto. La primera llegada del Oviedo surge de sus botas: una conducción, recorte e intento de centro al área que despeja la defensa local. Jugada marca de la casa y un avance de lo que le esperaría al Valladolid los siguientes minutos de partido. Seguramente fue el partido más ofensivo de los azules en la presente temporada y Nacho López tuvo un papel protagonismo en las operaciones de ataque.
Estrenada la categoría, cumplido otro sueño, Nacho López afronta nuevos desafíos. Porque ahora, en Segunda, los retos se multiplican. "Esto es una carrera de fondo, los resultados no son aún definitivos", analiza la competición; "Ahora es vital hacernos fuertes en casa. Algunos equipos importantes están pasando por un bache y cuando arreglen sus cosas, cambiará la perspectiva".
Los motivos de orgullo para el lateral se multiplican con un simple vistazo a las gradas. Nacho López, que en otras ocasiones le tocó seguir a su Oviedo como parte de la afición que se desplaza con el equipo, no se muestra especialmente sorprendido con la última exhibición. "Para mí es algo casi normal. Da gusto ver a tanta gente de azul en otros campos y sobre todo la manera en la que animan. Están todo el día animando. Presta mucho", exalta el zaguero.
Pensando en la Copa. Los hombres de Egea apenas tienen tiempo de saborear la victoria con más impacto de la temporada, Toca ponerse manos a la obra con la Copa. El Mirandés visita mañana el Carlos Tartiere y los azules quieren pasar su segunda eliminatoria ante su gente. El premio es asegurar una ronda ante un equipo de Primera. Aunque no sería contra un conjunto de los que disputan competición europea (quedan estos asignados automáticamente a equipos de Segunda B y Tercera).
Egea hará un lavado de cara total en su equipo. Jugarán los futbolistas con menos kilómetros en sus piernas. La principal duda se le plantea en la delantera. El argentino ya ha declarado que quiere darle continuidad al sistema con dos delanteros usado en Valladolid. Linares no puede jugar contra el Alcorcón en Liga, por lo que podría acompañar a Cervero en la Copa y apostar por Toché y Koné en el duelo liguero del sábado.
