La presentación de Miguel Sanz como nuevo responsable del área social del Oviedo sirvió a Joaquín del Olmo para lanzar varios mensajes. El asesor del club no esconde que en lo deportivo el club no atraviesa su mejor momento: "El domingo pasado jugamos muy mal", reconoce. También es consciente de que el hecho de haber sumado solo uno de los últimos nueve puntos posibles hace que "la gente esté intranquila", pero igualmente pidió "tranquilidad", insistió en que el proyecto del Grupo Carso "va más allá de muchas cosas", y añadió que "en momentos como éste nos damos cuenta de quién está con el club y quién no. No siempre en las buenas aparece la gente que uno piensa que va a aparecer, sino en las malas. Hay demasiadas oposiciones en el club", añadió.

Una vez lanzado el mensaje, Joaquín del Olmo presentó a Miguel Sanz y explicó cuál va a ser la función del periodista dentro del club. "Con Miguel Sanz queremos crear un nexo entre el club y el aficionado, algo que estaba en una línea de espera. Hay otros temas que los tenemos igual porque el año pasado nos concentramos más en al área deportiva para poder salir de Segunda B", dijo. Y añadió que eso sirvió "para lograr el ascenso en un solo año desde que cogimos el proyecto". Aún así, reconoció que han de mejorar en otros aspectos y que para eso se están uniendo personas como el propio Miguel Sanz o César Martín, el responsable de relaciones institucionales del club.

Una de las misiones que va a tener Miguel Sanz es retomar el contacto con los accionistas españoles y extranjeros: "Es cierto que ese tema lo habíamos descuidado y ahora con Miguel lo vamos a retomar. No hemos crecido como teníamos que haber crecido", explicó Del Olmo.

Miguel Sanz, por su parte, agradeció "la confianza" al Grupo Carso y explicó que en su nueva faceta intentará "mantener más contacto con el aficionado, especialmente con el de fuera".