Victoria del Real Oviedo en Anduva en un complicado partido que se le había puesto muy cuesta arriba. No solo en el marcador, que solamente evidenciaba una desventaja de un gol, sino por el control del partido que tenía el Mirandés y que parecía imposibilitar los intentos de que la reacción de los visitantes fructificara.

Todo cambió mediada la segunda mitad cuando, en un lapso de 4 minutos, Toché marcó dos tantos que permiten a los azules sumar su cuarta victoria en los últimos cinco partidos y alcanzar el tercer puesto en la clasificación.

De aquí al final el Oviedo se defendió con orden y acabó jugando los últimos minutos en campo contrario evitando los apuros finales que el resultado invitaba a presumir.

Es una máxima del fútbol que el que domina el centro domina el partido. El particular sistema que utiliza Carlos Terrazas, el 1-3-3-3-1, potencia precisamente esa zona central a costa de desguarnecer las bandas.

Así durante los primeros 25 minutos, hasta la llegada del primer tanto, se pudo ver a un Mirandés dominador. Más agresivo, las disputas eran suyas y los acercamientos al área eran habituales.

Pero los de Egea aprovecharon sus opciones. Las bandas quedaban liberadas y cada vez que el Oviedo conseguía cambiar el balón de un lado a otro, llegaba con peligro a través de Aguirre y Peña por la izquierda y Johannesson por la derecha.

Partido de ida y vuelta que se podía decantar para cualquier lado. Lo hizo de parte de los locales a través de un saque de esquina que remató Ortiz a la red elevándose sobre Peña en el segundo palo.

Este gol hizo daño a los visitantes que se descompusieron en parte hasta el descanso.

El paso por los vestuarios parecía venirle bien a los azules, para buscar la reacción, pero los burgaleses fueron los claros dominadores en la segunda mitad ante un Oviedo que perdió además la capacidad ofensiva de la primera parte.

El Real Oviedo lo pasaba mal pero en los minutos 64 y 68 Toché apareció al rescate. Primero, aprovechando un preciso centro de Susaeta, y luego tras una recuperación de Koné que le permitió superar al portero de disparo cruzado.

De aquí al final, y ya con Font y Rivera en el campo, el Oviedo recuperó la tranquilidad y aguantó sin mayores problemas hasta el final.

Buen final de partido y tres puntos importantísimos que los jugadores celebraron con los aficionados desplazados hasta Miranda de Ebro.

El Real Oviedo se coloca tercero, a 5 puntos del Córdoba y a solo 2 del Alavés y deja la permanencia, que debe ser el primer objetivo de la temporada, ya a 10 puntos.

Próxima jornada, domingo a las 19:15h en el Carlos Tartiere frente a uno de los en principio gallitos de la categoría, un UD Almería que vendrá a Oviedo en posición de colista.