Las cosas difícilmente podían ir mejor en el Oviedo. En los cinco últimos partidos han sumado trece puntos. Una racha positiva que les ha servido para consolidarse en la parte alta de la tabla y situarse a un punto del segundo, el Córdoba, ya en puestos de ascenso directo.

Y en ese océano de buenas noticias tan sólo la acumulación de lesionados puede perturbar un poco la tranquilidad en la que vive el club azul. Egea ya se vio obligado a cambiar la pareja habitual de centrales para el encuentro que ganaron (1-0) al Zaragoza. La lesión de Borja Gómez, que tendrá que ser operado de la rodilla, en el partido que los azules empataron (1-1) ante el Leganés le llevó a dar entrada en el once inicial a Verdés.

El central cumplió con creces, pero en una de las últimas acciones del encuentro, ya pasado el minuto noventa, se hizo daño y no pudo acabar el partido. El central valenciano no saltó ayer al campo de entrenamiento del Oviedo y está pendiente de ver cómo evoluciona lo que en un principio parece un esguince de tobillo. Pero, por si fueran pocas las dificultades de tener a dos de los tres centrales del equipo tocados, el otro que puede ocupar esa posición también se fue con problemas.

Jonathan Vila apenas pudo aguantar 22 minutos en el campo ante el Zaragoza. Unas molestias en los isquiotibiales obligaron a Egea a sustituirlo por Cristian Rivera. El gallego, pareja fija de Erice en el doble pivote azul, puede tener un recambio en el centro del campo. De hecho, Rivera cumplió satisfactoriamente con su papel. Pero, con la acumulación de bajas que está teniendo el equipo en la defensa, Vila era el hombre indicado para suplir la posible ausencia de Verdés. De momento Vila y el propio Verdés son sólo duda para el encuentro del sábado (20.15 horas) ante Osasuna. Borja Gómez, por su parte, es baja segura ya que tendrá que ser operado.

En el peor de los casos, si Vila, Verdés y Borja Gómez son baja para la próxima jornada, Egea tendrá que improvisar una solución para la defensa. Las opciones estarían entre tirar de algún central del equipo filial o reconvertir a alguno de los jugadores de la primera plantilla. Una de las opciones que contaría con más posibilidades sería la de subir a Kike Torrent, jugador del Oviedo B fichado esta temporada del Levante B.

Pero si los problemas en forma de lesiones se acumulan en el centro de la defensa, lo mismo sucede en el ataque. Linares lleva ya un tiempo ausente debido a una fascitis plantar. Un problema bien solventado con la presencia de un Toché que se ha convertido, con 9 tantos, en el máximo goleador del Oviedo. Pero es que el propio Toché tuvo que retirarse del campo ante el Zaragoza antes de tiempo por unas molestias musculares. Ayer fue otro de los ausentes en El Requexón.

Si coincidieran lesionados Toché y Linares para el encuentro ante Osasuna, Egea tendría o bien que alinear a Cervero junto a Koné para mantener el 4-4-2 o bien cambiar el sistema. En ese caso podría apostar por colocar a Borja Valle junto a Koné, con el berciano un poco más retrasado, y en las bandas mantener a Susaeta y a Aguirre.

La otra ausencia ayer en El Requexón fue la de Edu Bedia. El centrocampista azul no entró en la convocatoria para medirse al Zaragoza, pero aun así no pudo estar en la sesión de entrenamiento con sus compañeros al sufrir una gastroenteritis.