Fue un gol con un par de efectos. El primero, el que señala al equipo, servía para derribar el muro de Baraja. El Elche había ido creciendo a medida que pasaban los minutos, cómodo en su papel de equipo sometido. Las vías para la contra parecían abrirse producto del cansancio y de la ansiedad carbayona. Por eso, cuando Koné puso la bota de forma plástica para batir a Jiménez, el Oviedo dio el paso definitivo a la victoria. Pero al margen de la lectura colectiva el tanto tuvo tintes reivindicativos para el delantero. En plena racha de desacierto ante el gol, Koné se quitó un importante peso de encima con su remate a la red.

Koné había irrumpido con fuerza en el Oviedo esta temporada. El suyo fue seguramente el fichaje que más ilusionó a la hinchada., que guarda en la memoria sus exhibiciones hace un par de temporadas con el Racing. Por eso a la afición no le importó esperar a que el africano se recuperara por completo de la operación en la rodilla. Asombró en el partido de Copa ante el Mirandés, con una exhibición prometedora y el buen nivel se mantuvo varias semanas. Nunca llegó a explotar como goleador pero se mostraba como un atacante trabajador y perfecto asistente. Sus chispazos en cada partido se ganaban la ovación del Tartiere.

Pero su ángel fue apagándose poco a poco. Perdió explosividad, algo que habitual en futbolistas que han pasado por una larga lesión y se encuentran en una especie de pretemporada particular. Y la falta de gol no ayudó.

El punto de inflexión llegó ante el Tenerife. El africano recibió un balón franco para hacer el 2-0 pero se perdió en un control impreciso. La ansiedad había podido con él, como reconoció Egea posteriormente. El técnico decidió que necesitaba un descanso, quizás más mental que físico, y fue suplente los dos siguientes encuentros. Ante el Elche, al fin, se rompió la racha casi tres meses después: no marcaba desde el 6 de diciembre ante el Llagostera.

"Después de esta sequía estoy muy feliz por haberlo hecho. No estaba cómodo con tanto tiempo sin marcar pero en este tiempo mis compañeros me han ayudado y también he recibido mensajes de apoyo de la afición. Se agradece", comentó el africano con la sonrisa de goleador en la cara.

Juicio en Pamplona. La semana de optimismo tras su regreso a la faceta goleadora tiene una cita extradeportiva hoy. El africano será juzgado por un supuesto incumplimiento de contrato con Osasuna en el Juzgado de lo Social número 3 de Pamplona. Osasuna demandó a Koné cuando era jugador del Racing, y de forma subsidiaria al club cántabro, por incumplimiento del contrato firmado.