David Generelo vivió un plácido estreno en el Carlos Tartiere. Era una jornada de celebraciones y el juego del equipo invitó a que se mantuvieran los festejos. También sonrió el resultado, por supuesto. La victoria permite a los azules romper la peor racha de la temporada con tres derrotas y les mete de lleno en la lucha por el ascenso. El extremeño solo podía sacar conclusiones positivas de la experiencia: "Hemos dado la cara, interpretamos bien el partido y fuimos superiores. Estoy muy contento con los esfuerzos y con la implicación de la gente".

Para Generelo, los tres puntos tienen un doble efecto: el clasificatorio y el de acercamiento a la hinchada, desencantada con la plantilla tras la extraña salida de Egea hace dos semanas. "La victoria nos refuerza a nosotros como equipo y también de cara a la afición. Estos son los jugadores que tienen que lograr los objetivos. Era importante cambiar la dinámica de derrotas. Los chicos se lo merecen", explicó el entrenador. "El partido no me pareció sencillo a pesar del resultado. Hicimos un buen partido, si mantenemos este nivel pueden llegar más victorias. Estoy contento con la dinámica de trabajo", añadió.

Una de las decisiones más importantes fue la elección del guardameta. Esteban ya se había entrenado con sus compañeros por lo que estaba en condiciones de disputarle el puesto a Miño. Generelo eligió al catalán y a Esteban le tocó seguir el choque desde el banquillo. Preguntado por esta circunstancia, el entrenador respondió que "confío en todos los futbolistas de la plantilla. Tras el trabajo de la semana y en atención al rival, pensamos qué es mejor, después hago un once y saco a los que creo que están más listos para competir".