Iván Ania y Adolfo Pulgar pertenecen a generaciones diferentes. El primero tiene aún reciente su etapa de futbolista mientras que al segundo le queda ya algo más lejos. En lo que sí coinciden es en que los dos son exjugadores del Oviedo y también en haber sido entrenadores del filial azul. Ahora además luchan en el grupo asturiano de Tercera: Ania por salir campeón con el Caudal y Adolfo Pulgar por alcanzar con el Tuilla el cuarto puesto que le permita jugar la promoción de ascenso. Dos oviedistas que analizan en LA NUEVA ESPAÑA la sorprendente llegada de Generelo al banquillo y la no menos sorprendente salida de Sergio Egea. El entrenador que logró subir a los azules a Segunda.
-¿Qué les pareció la victoria (3-0) ante la Ponferradina?
-Adolfo Pulgar: Yo de todos fue el mejor partido que vi al Oviedo. Pero no cerremos los ojos, creo que la Ponferradina estuvo a un nivel muy bajo. Fue un equipo que dio muchas facilidades, que dejaba combinar entre líneas. Susaeta y Borja Valle jugaban como querían entre líneas. No salía nadie. Fue buen partido pero hay que ser realistas y saber que el adversario desde el punto de vista táctico puso muy poca oposición.
-Iván Ania: El Oviedo hizo un buen partido, con un marcador contundente, y de cara al futuro está victoria les va a dar confianza. El rival va a tener serios problemas para conseguir la salvación por la dinámica que llevan y por lo que demostraron en el partido.
-¿Qué posibilidades piensan que tiene el Oviedo de subir?
-Pulgar: Es difícil. Subir de Segunda a Primera siempre fue difícil. Hay muchos equipos que pueden llegar. Lo mismo que digo para el Oviedo vale para los otros equipos. Lo que sí pienso es que el Oviedo va a estar en la pomada.
-Iván Ania: Parecido. Estoy mirando para la clasificación (habla mientras mira el móvil) y veo que el Oviedo está a cuatro puntos del segundo y a cinco del primero; o sea, que va a estar ahí hasta el final. Pero es que además el decimotercero lleva 44 puntos (cinco menos que el Oviedo). La clave es que si en este momento estás fuerte vas a tirar para arriba y si te desinflas vas para abajo.
-¿Y cómo le puede afectar al equipo todo lo que ha pasado tras la marcha de Egea?
-Pulgar: Ahora ya no hay medias tintas. O están arriba o como se tuerzan un poco las cosas van a ir para abajo. Nunca van a navegar entre dos aguas. Si las cosas van mal la afición tiene hay algo guardado que lo sacará seguro y eso va a pesar mucho sobre el equipo. Pero si los resultados acompañan... En el fútbol los resultados lo tapan todo.
-Iván Ania: La incertidumbre de no saber quién es el entrenador afecta. Ahora está claro quién va a ser el técnico hasta el final de temporada y eso a la hora de trabajar entiendo que va a dar tranquilidad. Pero todas las cosas que pasaron evidentemente no suman. No sé si restan, pero sumar no suman.
-¿Qué sensación les ha dejado la salida de Egea?
-Pulgar: A mí me quedó mala sensación. Primero por la dinámica que llevaba el equipo. El año pasado fue el primero que sólo se habló de fútbol y se consiguió el ascenso y este año estaban en tercera posición. También por el afecto que tengo por el entrenador. No lo esperaba. Pero eso ya no sirve de nada. Hay que mirar al frente. Aún así va a quedar una herida abierta que sólo los resultados puede cicatrizar.
-Iván Ania: La primera sensación fue de sorpresa. Y luego de incertidumbre por quién iba a ser el entrenador. Muchos rumores. Y ahora una sensación de tranquilidad después del partido del sábado. Pero cada domingo va a ser una final y cada domingo si el resultado no es bueno se volverá a recordar lo que ha pasado.
-¿Habían vivido algún caso de un futbolista que pasa de jugador a entrenador tan rápido como el de Generelo?
-Pulgar: El único que se me ocurre es el caso de Luis Aragonés. Está claro que Generelo tiene ideas de fútbol, mucha experiencia como jugador. Pero hay que esperar. No sólo porque hayamos sido jugadores tanto Iván Ania como yo vamos a ser buenos entrenadores. Luego hay que enfrentarse a circunstancias y saber manejarlas.
-Iván Ania: Yo lo viví en el Lorca. Cuando fui a jugar al Lorca el año anterior Emery había sido el entrenador. Subió al equipo de Segunda B a Segunda tras empezar como jugador y al año siguiente estuvo a punto de subir a Primera. Allí funcionó. Pero para los entrenadores que vinieron después fue un handicap. Todo lo que no era lo que hacía Emery no valía. Vi también el paso, que no fue exactamente igual, de Oli, que acabó una temporada como jugador en el Cádiz y en verano cogió al equipo. Yo estaba en Cádiz, terminé contrato y fue cuando él cogió el equipo.
-¿Cómo se puede lidiar con los que han sido tus compañeros hasta hace tan poco?
-Iván Ania: Lo que es difícil es tomar decisiones. Si tienes la suficiente personalidad para hacerlo, bien; pero no es fácil. Muchas veces el jugador no distingue que ya no eres su compañero y que ahora eres su entrenador. Es difícil por los dos lados: por el del jugador y por el del entrenador. De cara al grupo si las decisiones que toma son coherentes el grupo las va a ver bien; si no lo son los problemas pueden aparecer. Hay veces en las que el que no juega no entiende las decisiones, pero que al menos sean coherentes; es decir, que no uno que lo haga fatal siga jugando y otro que lo está haciendo bien no vaya ni convocado.
-Pulgar: Hay que saber manejar a 27 jugadores. Ahora todo es muy guapo, pero cuando pasen los partidos sólo juegan once y siete entran en la convocatoria. El jugador siempre es egoísta. Todos queremos jugar. Tendrá que saber manejar esas situaciones en el vestuario. Lo que decía Iván Ania: tener personalidad.
-El otro día Generelo tomó decisiones importantes como dejar fuera de la convocatoria a Diegui Johannesson y en el banquillo a Esteban. ¿Qué opinan?
-Pulgar: Tiene la potestad de tomar ese tipo de decisiones. Seguramente Diegui (Johannesson) no estará contento y a lo mejor Esteban tampoco. Pero el tiempo dirá quien tiene y quien no tiene la razón.
-Iván Ania: Desde el punto de vista del aficionado, como somos nosotros ahora, para mí las dos son decisiones sorprendentes. Esteban es la referencia en la portería de la temporada pasada y de la actual. Y Diegui (Johannesson) estaba siendo de los mejores y ahora está en un segundo plano totalmente. Sin convocar.
