La última vez que el Oviedo visitó el campo del Nàstic lo hizo en un momento de felicidad absoluta. Fue el 6 de junio del año pasado y los azules llegaban después de doblegar al Cádiz y poner fin así a doce años fuera del fútbol profesional. También el conjunto catalán estaba de fiesta. Y es que se medían los dos equipos que habían logrado el ascenso a Segunda tras superar las eliminatorias en las que se enfrentaban los cuatro campeones de grupo en Segunda División B. El Oviedo había superado al Cádiz y el Nàstic al Huesca.
El domingo se vuelven a ver las caras estos dos equipos. Ahora en Segunda. Y los dos con opciones de volver a ascender. Lo hacen además en una situación muy parecida: los dos llegan empatados a puntos en la clasificación y entre los conjuntos que de acabar ahora la temporada disputarían la promoción de ascenso a Primera. El Oviedo es tercero y el Nàstic de Tarragona cuarto, los dos con 52 puntos, a cinco de meterse en una de las dos plazas de ascenso directo.
El último equipo que logró encadenar dos ascensos consecutivos hasta llegar a Primera fue el Éibar. Lo hizo en las temporadas 2012-13 y 2013-14. El conjunto vasco juega ahora su segunda campaña consecutiva en Primera División (las dos primeras de su historia).
Un ascenso el del Éibar en el que el Oviedo estuvo implicado. Y es que el equipo vasco tuvo que superar al azul en una de las tres eliminatorias que superó para ascender a Segunda División. Concretamente en la segunda de ellas. El Oviedo había superado previamente al Albacete y el Éibar al Alcoyano. El equipo azul, entrenado entonces por Granero, fue superado en la ida (1-2) y en la vuelta (1-0) por un Éibar que ya entonces pintaba muy bien. Un grupo que se mantuvo la siguiente temporada en Segunda y que consiguió hacer una auténtica machada y llevar por primera vez en su historia al Éibar a Primera División. El Oviedo tuvo que esperar aún dos temporadas más para ver la luz al final de un túnel en el que estuvo inmerso doce años.
El Oviedo, la temporada pasada, quiso redondear la gesta del ascenso con el título de campeón de Segunda B. Y eso que el último precedente en el campo del Nàstic es una derrota (2-1). Pero el gol de Sergio García dejó la eliminatoria abierta y en el Tartiere el conjunto azul culminó la fiesta goleando (3-0) a los tarraconenses. Los tantos fueron de Linares (2) y de Cervero.
Esta temporada estos dos recién ascendidos están rindiendo por encima de los que se esperaba de ellos. Los dos llevan toda la campaña en los puestos cabeceros. Ninguno ha sufrido para confirmar la permanencia. Una trayectoria diferente a los otros dos equipos que subieron de Segunda B. Tanto Huesca como Bilbao Athletic están luchando por conseguir la permanencia. El filial vasco, colista, está ahora a nueve puntos de la salvación. Los oscenses, por su parte, lograron salir de la zona de descenso tras ganar (2-0) la pasada jornada precisamente al Nàstic.
La igualdad que está habiendo esta temporada en Segunda hace que todo esté muy abierto de cara al ascenso a Primera. El Leganés y el Alavés, primero y segundo respectivamente, los dos con 57 puntos, han cogido un pequeño colchón en la lucha por los dos puestos de ascenso directo. Pero ahora sus principales perseguidores son dos recién ascendidos que pretender emular a un Éibar que ahora parece consolidado en Primera. Para lograrlo deberán realizar un final de temporada brillante. El Oviedo necesita empezar por cambiar su mala racha fuera de casa y ganar el domingo su primer partido del año lejos del Tartiere.
