El Oviedo necesitaba un golpe de autoridad y llegó en una tarde de gran acierto de los hombres de arriba. El 4-1 le sirve a los de Generelo para refrendar su candidatura al play-off y recuperar la moral del bloque, tocada tras la derrota de Palamós. Por eso, la lectura de Generelo se dirigía al doble objetivo conquistado. "Hacía falta una victoria, y cuando es con un marcador tan elevado es mucho mejor, sobre todo para que los jugadores cojan confianza", analizó el extremeño en la sala de prensa.

Generelo se mostró tan orgulloso del triunfo que aseguró que "los primeros 20 minutos de partido fueron los mejores desde que soy entrenador. Interpretamos muy bien el juego, aunque es verdad que luego se igualó. En la segunda parte intentamos aprovecharnos de lo que nos dejaba el Mirandés, para tener el partido controlado". Y añadió: "El Mirandés tiene un sistema muy particular. Si estás acertado, con buen manejo de balón y moviéndoles, les puede pasar factura en la segunda parte. El inicio fue muy bueno y se ha notado porque hemos tenido espacios en la segunda parte",

Para el entrenador el triunfo puede ser un punto de inflexión. "Espero que los jugadores cojan confianza. Debemos celebrar la victoria y ponernos a preparar el choque de Almería. Una victoria allí nos abriría las opciones de par en par", señaló. "Tenemos por delante un reto muy importante y confío en mis jugadores. Ojalá esta victoria les haga venirse arriba. Hay tanta igualdad que el equipo que menos falle en la recta final se llevará el gato al agua. Ojalá encontremos regularidad que no hemos tenido para celebrar algo importante", agregó.