Fernando Hierro y Joaquín del Olmo, los dos principales responsables de la parcela deportiva con el apoyo de César Martín, ya han dado los primeros pasos con el boceto del Oviedo que competirá la temporada que viene. No se quiere dar ningún paso en falso pero se pretende que el ritmo sea constante. El trabajo en los despachos se desarrolla desde la semana pasada y el siguiente paso será el de hablar con los futbolistas que terminan contrato el 30 de junio para que el club les comunique su decisión al respecto.

El primer capítulo, llevado a cabo a lo largo de la semana pasada, se dirigió a trazar a grandes rasgos el aspecto de la plantilla. El criterio de Hierro al respecto es claro: una plantilla corta, de 20 o 21 futbolistas, y la ayuda del filial. El acortamiento de la plantilla es una de las bases del nuevo enfoque: menos problemas en la gestión de minutos y mayor protagonismo de la cantera.

La línea continuista está formada por los futbolistas con contrato en vigor. Los al menos once jugadores con vinculación más allá del 30 del junio (Johannesson, Vila, Verdés, David Fernández, Borja Gómez, Peña, Edu Bedia, Erice, Susaeta, Toché y Linares, están citados para el 11 de julio en las instalaciones de El Requexón, el día previsto para el comienzo de los entrenamientos. Que tengan contrato no significa que tengan asegurada su continuidad. De aquí al inicio de la pretemporada puede haber movimientos y la llegada de futbolistas en algunas posiciones podría provocar la salida de otros.

En cuanto a los futbolistas sin vinculación a partir del 30 de junio la situación se estudiará esta semana. El club quiere mantener reuniones con algunos de los jugadores en las que estén presentes tanto Hierro como Del Olmo. Se quiere tratar la situación con cada uno de ellos. Hay futbolistas dentro de este grupo que podrías seguir con los azules, aunque la mayor parte son jugadores que no cuentan en el nuevo proyecto.

El capítulo de fichajes avanza a su ritmo pero se quiere esperar a las decisiones con los actuales futbolistas antes de lanzarse de lleno en el mercado. Aunque también hay casos especiales. El ejemplo más claro es el de Michu. El Oviedo ya intentó su contratación el verano pasado y en el mercado de invierno posterior. En ambos casos, el delantero pidió un tiempo para probar su estado y el Langreo de su hermano Hernán le ofrecía la oportunidad de medirse.

El contacto entre Michu y los rectores del club es constante y la sensación es que si el delantero se ve en condiciones, vestirá la camiseta azul el año que viene. Parece que la decisión depende de él. No ha habido, sin embargo, profundización sobre cuestiones contractuales ni se espera que el anuncio de su fichaje sea inminente, o al menos eso consideran en el Oviedo. Fernando Hierro ya se ha manifestado públicamente sobre el delantero: "Es un futbolista extraordinario, pero aún no sé si va a jugar en el Oviedo".