Tras su última temporada en Oviedo, en la que casi no disfrutó de minutos, a Diego Cervero no se le ha olvidado hacer goles ni mucho mejos. El delantero ovetense marcó gol, por segunda jornada consecutiva, en la victoria del Fuenlabrada ante el Logroñés. Tras una gran jugada individual de Abel Molinero, el delantero recibía el balón al borde del área. Era el minuto 55 de partido y el exoviedista arrancaba una conducción en diagonal con la que se internaba en el área y finalizaba con un golpeo seco cruzado al poste derecho del guardameta del Logroñés. Una jugada poco común en Cervero y una imagen posterior a la que si que nos tiene acostumbrados: volvía a celebrar un gol con rabia y vestido de azul. Más tarde, en el minuto 76, Dioni, otro conocido para la afición oviedista, lograba de penalti el segundo tanto para los locales. De esta manera el equipo madrileño sellaba la remontada después de que el Logroñés se adelantase en el encuentro en el minuto 11. Muchas cosas han cambiado en la vida Diego Cervero, pero su olfato goleador y su coraje continúan siendo su seña de identidad. Dos tantos en dos jornadas le han colocado como segundo máximo goleador de su grupo. El equipo marcha en la mitad de la tabla pero ya hay un nombre que destaca por encima de todos. "El Doctor", como ya le llaman en el club azulón, ya se ha ganado el cariño de su nueva afición a base de goles, informa Javier BRAÑA.