En este inicio de temporada gran parte del peligro del Oviedo está llegando por las bandas. Especialmente por la izquierda, la que suele ocupar Nando. El valenciano ha comenzado la campaña en un gran estado de forma, encandilando a la afición con su descaro para encarar a los defensas rivales y con su velocidad. El sábado allanó el camino del Oviedo hacia la victoria ante el Almería marcando el primero de los dos goles que los azules le endosaron a los andaluces.

Un tanto además de muy bella factura, aprovechando un pase de tacón de Toché para irse a toda velocidad hacia la portería, driblar al último zaguero que había en su camino y ajustar el disparo al palo. En una sola acción puso sobre el terreno de juego todas sus mejores virtudes y así consiguió meterse al público del Tartiere en el bolsillo.

Pero Nando no es el único peligro que tiene el Oviedo por las bandas. El conjunto azul sigue contando por la derecha con Susaeta, que acaba de comenzar su cuarta temporada de azul. El extremo vasco es una garantía a balón parado, cada temporada acaba entre los máximos goleadores del equipo y siendo uno de sus futbolistas más determinantes.

Para reforzar los costados el Oviedo ha incorporado a otros dos jugadores: Martín Alaniz y Jorge Ortiz. El uruguayo está siendo hasta el momento uno de los recursos que se guarda Hierro en el banquillo para revolucionar el final de los partidos. En la derrota (1-0) ante el Valladolid lo sacó en los últimos diez minutos cuando los azules estaban volcados en busca del empate y en la victoria (2-0) ante el Almería lo volvió a meter de refresco en los últimos instantes para dar oxígeno al equipo. El uruguayo brilló en la última acción del encuentro ante el conjunto andaluz con una gran jugada que a punto estuvo de culminar Linares con un gol que hubiera redondeado el estreno azul de la temporada en el Carlos Tartiere.

Pero todavía falta uno por entrar en escena. Y es que a estos tres extremos se va a unir ahora el inédito Jorge Ortiz. El toledano se ha pasado toda la pretemporada en la sombra, recuperándose de unas molestias físicas. El Oviedo no ha querido arriesgar en su recuperación y ha preferido asegurarse de que está en plenas facultades. Ortiz es un jugador que llega procedente del Fuenlabrada y del que el cuerpo técnico espera mucho. Esta semana comenzó a entrenarse con el resto de la plantilla en El Requexón. Por fin se le vio junto al resto de sus compañeros y completando el grueso de la sesión. Un nuevo candidato para jugar de extremo, en este caso en el derecho, que tratará de ganarse un sitio en los planes de Hierro.

El buen rendimiento que están teniendo los jugadores de banda del Oviedo, unido al gran estado de forma en el que ha comenzado la temporada el delantero Toché, hacen del Oviedo un equipo con mucho potencial ofensivo. También Pereira empezó a demostrar de lo que es capaz el sábado en el partido disputado en el Tartiere. El gallego es otro jugador desequilibrante que aprovecha muy bien los espacios que genera la vigilancia que los defensas rivales ejercen sobre el temido Toché.