El regreso del Oviedo a Cádiz es una cita especial para el oviedismo, que tiene al campo gaditano como el símbolo del final de la etapa más triste de la historia. Fue en Cádiz donde el Oviedo dio el portazo final a época de los campos de barro, las urgencias económicas y las continuas decepciones deportivas. Sonreirá el aficionado al rememorar aquel gol de David Fernández y su posterior celebración y también lo hará un grupo importante de la actual plantilla, testigo directo de aquella hazaña.

Entre los veinte hombres que Fernando Hierro ha desplazado a Cádiz hay seis que participaron en aquel encuentro de forma directa. David Fernández es el hombre con más razones para desear reencontrarse con el Ramón de Carranza. Allí firmó una actuación impecable coronada con el tanto que siempre será recordado. El cabezazo a los 52 minutos tuvo un invitado especial. Néstor Susaeta fue el que centró desde la esquina ganándose una pequeña porción en la historia que perdurará mucho tiempos. Junto a los partícipes del gol, jugaron aquella tarde de titulares otros tres hombres.

Esteban portó el brazalete de capitán y fue el que dio tranquilidad desde el primer minuto. O incluso desde antes: su salida al terreno de juego a calentar mientras saludaba a la afición azul supuso el primer gesto en la victoria carbayona. Erice disputó los 90 minutos en el centro del campo aportando trabajo y solidez. Su participación fue dudosa hasta última hora pues había sufrido un golpe en su coche algunas horas antes. La intervención del doctor y de los fisios le permitió jugar. Jonathan Vila fue otro de los valladares aquella tarde, formando una dupla infranqueable junto a David Fernández. También disputó los 90 minutos. Por último, Linares contribuyó durante 85 minutos a aquel desenlace, antes de ser sustituido por Omgba. Fue uno de esos duelos en los que el aragonés ofrece más trabajo que definición.

En la expedición azul hay otro hombre que también fue parte de aquel éxito. Diegui Johannesson disputaba al mismo tiempo que el Oviedo ascendía la eliminatoria de ascenso con el Vetusta, con resultado amargo: derrota ante el Arenas de Getxo en la prórroga. El internacional islandés fue usado por Egea en ocasiones de urgencia en el lateral y completó 11 encuentros (8 como titular) con el primer equipo. Existe otro caso curioso, el de Dani Bautista. Fue titular aquella tarde e incluso pudo hacer el 0-2 pero su zurdazo se fue al poste. Hoy en día sigue en el club azul en el puesto de delegado.

Por si fueran pocos los recuerdos, las horas previas siguen un guión similar: la expedición se ha concentrado en Jerez de la Frontera, en el mismo hotel que hace dos temporadas.

Para el resto de citados, la historia les sonará por la trascendencia que tuvo aquella eliminatoria y por lo que hayan podido comentar sus compañeros. Pero aquello es cosa del pasado. El presente del Oviedo en la competición pasa por sumar este mediodía en Cádiz, ganar en confianza y coger el ritmo adecuado para un aspirante.

Por parte gaditana también quedan algunos supervivientes de aquella eliminatoria. En el bando local, tres futbolistas de la plantilla participaron en el campo en aquella derrota: mantecón, Servando y Garrido. Los tres disputaron los 90 minutos de juego.