Hace poco más de diez meses, Oviedo y Lugo tuvieron un encontronazo fuerte a cuenta de las entradas para el duelo que enfrentó a los dos equipos en la ciudad gallega (2-2). Era la jornada 22. El club azul pidió 3.000 entradas a 20 euros para su afición. El Lugo se negó porque, consciente del desplazamiento masivo, no quería convertir su campo en un pequeño Tartiere y ofreció sólo 870, la mitad a 40 euros. La cosa sentó tan mal que acabó en boicot. Las peñas azules decidieron suspender el viaje, el Oviedo apoyó a sus aficionados negándose a vender las entradas cedidas y Lugo se quedó sin el beneficio económico que le hubiera reportado la presencia de miles de oviedistas por sus calles.
La historia no se volverá a repetir esta temporada. Al menos así lo esperan los dos clubes, que ya han alcanzado un acuerdo para que la afición azul no tenga problemas de entradas en el partido de la segunda vuelta, que cae en Semana Santa, con muchos oviedistas de vacaciones. El encuentro está previsto para el fin de semana del sábado 15 y el domingo 16 de abril, que coincidiría con el domingo de Resurrección. Las fechas facilitan todavía más el viaje de los aficionados.
"La afición del Oviedo no va a tener ningún problema por nuestra parte. Entendemos que habrá una demanda bastante amplia y la oferta será suficiente para cubrirla", aseguró ayer, en conversación con este periódico, Miguel Otero, consejero del área social del Lugo y representante de las peñas lucenses. "Tenemos un acuerdo firmado que será satisfactorio", añadió.
Otero evitó concretar la cantidad de entradas pactada, "porque entendemos que lo tendrá que comunicar el Oviedo", pero insistió en que la afición "no tendrá problema" y que "la recibiremos con los brazos abiertos".
Las rencillas entre Oviedo y Lugo parecen, pues, olvidadas. Otero no quiere incidir mucho en lo sucedido el año pasado, un episodio que califica como "malentendido" y del que quiere pasar página. "Está todo olvidado por nuestra parte y entendemos que también por parte del Oviedo. Hay cordialidad entre las dos instituciones", agregó. Al club azul le interesa satisfacer a sus propios aficionados y, según el consejero lucense, el acuerdo garantiza entradas suficientes para una presencia masiva de la marea azul en el Ángel Carro. "Tenemos ganas de poder disfrutar en el partido de vuelta de un grandísimo ambiente", agregó Otero, que calculó que mañana llegarán a Oviedo unos 400 aficionados del Lugo. El club gallego cuenta con 18 peñas y está en fase de formar su propia federación.
Entre parte del oviedismo, al Lugo se le considera un equipo "amigo" del Sporting por su contribución al ascenso rojiblanco, extremo que niega el propio Otero: "Intentamos mantener buenas relaciones con todos y la relación con el Sporting está a la par que con el Oviedo", concluye Otero.
