Oviedo, M. L. SERRANO

El Oviedo empieza a generar una rutina positiva: vivir en el play-off. La clasificación está apretada y hay muchos equipos separados por pocos puntos, pero los azules aguantan en la parte alta de la clasificación incluso tras las derrotas, como ocurrió la semana pasada ante el Huesca. Con la gran victoria de ayer ante el Levante, el equipo de Fernando Hierro suma 23 puntos y se asegura otra semana más en la zona noble de la tabla. Los azules durmieron ayer en cuarta posición con 23 puntos, ocho menos que los levantinos y uno menos que segundo y tercero, Girona y Sevilla Atlético respectivamente.

Hoy quedan seis partidos de Segunda por jugar, entre ellos los de Reus, Huesca y Zaragoza, perseguidores inmediatos de los azules, pero por muy mal que se den las cosas el Oviedo sería séptimo en la tabla, un puesto que daría acceso al play-off porque el tercero, el Sevilla Atlético, no puede subir al ser un filial. Al Huesca (21 puntos) sólo le vale la victoria en Vallecas frente al Rayo para superar al Oviedo. El Zaragoza (20 puntos) tiene que ganar ante el Getafe por dos o más goles de diferencia para superar a los azules y el Reus (20 puntos), tendría que superar al Gimnastic de Tarragona por tres o más goles para adelantar al equipo azul.

Los carabayones acumulan, así, cinco jornadas consecutivas en puestos de play-off, desde que vencieron al Tenerife en el Tartiere por 2-0, que es el mismo resultado que han conseguido en sus otros tres triunfos en casa (Almería, Rayo y Levante). El próximo partido de los azules es el sábado a las 18 horas en Madrid ante el Alcorcón, un equipo que transita por la parte baja de la tabla.

Ayer, el Girona doblegó al Lugo (3-1) y se colocó segundo. Los gallegos pueden dejar el play-off hoy. El Sevilla B, que empezó ganando en Mallorca, se dejó remontar y acabó empatando.