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El Tartiere levanta el ánimo

El Oviedo ha hecho el 75 por ciento de sus puntos (24) como local y es el tercer mejor equipo de la categoría ante su gente

Aficionados azules animan al equipo ante el Valladolid. JULIÁN RUS

La exigencia del Tartiere, tantas veces criticada, también tiene una lectura amable. Es la capacidad de exprimir al futbolista, de pedirle lo máximo, la que mantiene al Oviedo vivo en los momentos más complicados. Debates sobre exigencia al margen, la realidad se encarga de demostrar que el Oviedo es más feliz cuando juega ante su gente. El ejemplo más claro se ha podido ver estas dos semanas. En el momento más gris de la temporada, con el equipo acumulando tres derrotas consecutivas, los dos partidos en el municipal ovetense se presentaban como clave para reaccionar. Y el seis de seis sumado deja claro que el Tartiere siempre está ahí cuando se le necesita.

El Oviedo ha regresado a las posiciones de play-off con una reacción notable. Lo hace apoyando su candidatura a la promoción en su rendimiento como local: de los 32 puntos sumados hasta la fecha por los azules, 24 los ha logrado en el Tartiere y 8 a domicilio. Lo que significa que el 75% de los puntos logrados han salido del municipal ovetense. El saldo de goles también revela la importancia de su campo. Como local, el Oviedo ha anotado 16 goles (de los 25 totales que lleva en la competición) y ha recibido 7 (por los 19 que ha recibido lejos de Asturias) en 12 partidos. Los resultados han sido de siete victorias, tres empates y tan solo dos derrotas.

Fernando Hierro sabe que tiene en los partidos como local el mejor aliado para cimentar las opciones de sus pupilos al éxito al final de temporada. En la actualidad, solo hay dos conjuntos que presenten mejores números que los azules ante su gente. El Levante, líder indiscutible, suma 29 puntos como local, gracias a las nueve victorias (ayer venció al Numancia por 1-0) y dos empates: aún no conoce la derrota. Le sigue en cuanto a rendimiento en su feudo el Girona (28 puntos en Montilivi tras el 2-0 de ayer al Sevilla Atlético).

Contrastada la fiabilidad del Oviedo con el apoyo de su gente, la gran asignatura pendiente siguen siendo los encuentros a domicilio. Lejos de Asturias han llegado las tres decepciones mayúsculas de la temporada, las tres goleadas que hicieron daño en el oviedismo: 4-0 en Huesca, 5-1 en Alcorcón y 5-3 en Sevilla.

Por eso, el próximo encuentro liguero cobra especial importancia dentro de la caseta azul, El duelo ante el Almería (domingo, 18.00 horas) es un nuevo test para evaluar la reacción del conjunto carbayón. El Oviedo acumula cuatro derrotas consecutivas lejos de su estadio: 5-3 en el Pizjuán, 2-1 en la Romareda, 5-1 en Santo Domingo y 4-0 en El Alcoraz. La última vez que los azules regresaron a Asturias con algo positivo fue en el 0-1 de La Condomina ante el UCAM, en octubre del año pasado. Almería se presenta ahora como el escenario ideal para romper el maleficio.

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