El Oviedo celebró su 91.º aniversario a lo grande. Los azules volvieron a demostrar que el Carlos Tartiere sigue siendo un fortín. Ayer lograron su sexta victoria consecutiva en su campo y lo hicieron ante uno de los mejores equipos de la categoría en un partido intenso y disputado que encarriló en los primeros ocho minutos de la segunda mitad.

Los azules realizaron partido muy serio en defensa y fueron efectivos en ataque, con un Toché que volvió a demostrar su olfato goleador.

A eso se unió las decisivas intervenciones del meta Juan Carlos, que desbarató al menos tres ocasiones claras del equipo catalán.

La primera mitad fue muy intensa y disputada. El estado del terreno de juego, por la lluvia caída todo el día, propició un juego muy rápido y muchas disputas en los balones divididos. El Girona salió mejor, con buen dominio del balón y siempre intentando progresar con sentido. El Oviedo se defendió con orden y sus salidas a la contra siempre eran peligrosas, en especial por la banda izquierda en la que Nando creo varias situaciones de peligro.

El Girona no tardó en avisar y lo hizo con un disparo lejano de Borja García que salió rozando el poste.

La respuesta del Oviedo llegó diez minutos después en una jugada que inició Nando, con pase a Linares y su centro fue rematado por Toché, evitando el portero René y el poste, el primer gol del partido.

El Girona tenía el control del partido, pero el Oviedo apenas concedía ocasiones y además sus rápidas salidas al contraataque le creaban problemas al equipo catalán,

En el tramo final de la primera mitad, el Girona tuvo dos claras opciones para adelantarse en el marcador, la primera de ellas de Coris, tras un mal despeje hacia el centro de Costas. El lateral se encontró con el balón controlado en el centro del área, pero Juan Carlos, con una gran intervención envió su disparo a córner. Poco después sería Portu el que obligaría de nuevo al meta oviedista a emplearse a fondo para rechazar su disparo, mientras que la réplica de los azules llegó en un saque de esquina que remató en última instancia Toché a la red, pero el árbitro a instancias de su asistente lo anuló por fuera de juego.

La segunda mitad no pudo comenzar mejor para los azules. En la primera jugada forzaron un saque de esquina y el lanzamiento de Susaeta fue peinado en el primer palo por Linares para que Toché en el segundo rematase a la red.

Y por si fuera poco, ocho minutos después, el propio Toché iba a culminar un gran pase de Diegui para batir de disparo cruzado a René, en una jugada que había iniciado el propio delantero en combinación con Linares.

Quedaba todavía mucho tiempo por delantero, pero el Oviedo tenía el partido en el terreno que le convenía ante un Girona que no se rindió y buscó acortar distancias. Los catalanes dispusieron de una doble ocasion en el minuto 59, pero Juan Carlos volvió a ser decisivo para desbaratar los remates, primero de Pere Pons y más tarde de Borja García.

Y a la jugada siguiente el Oviedo pudo sentenciar el partido en una jugada de contraataque, pero Kiko Olivas acertó a cortar el pase de Nando sobre un Linares que le acompañaba en solitario.

En los últimos 20 minutos, el Girona puso todas sus bazas ofensivas en el campo con la entrada de Christian y Sandaza, mientras que Hierro trato de asegurar más la posesión con la presencia de Rocha y Borja Domínguez. Los azule s aguantaron las acometidas del equipo catalán entre el delirio del Tartiere que celebró la victoria y el cumpleaños del equipo ante unos de los mejores equipos que pasó esta temporada por el Carlos Tartiere.