Pocas personas habrán sentido tanta satisfacción como Paco Herrera con el desarrollo de acontecimientos del pasado fin de semana. Para el técnico del Valladolid, su encuentro ante el Elche era una cuestión de supervivencia. Se jugaba el puesto y las opciones de ascenso de los suyos tras el varapalo sufrido en Sevilla una semana antes, con aquel 6-2 que había puesto patas arriba Pucela. Pero el Valladolid ganó, 2-1, al Elche. Y respiró. Más aún con el resto de resultados: ninguno de los siete primeros clasificados logró la victoria el fin de semana. La tensión aumenta en la recta final y cualquier paso adelante puede ser significativo.

En una competición tan igualada, a los de arriba también les está costando mantener el ritmo al que estaban acostumbrados en el resto de la competición. Los resultados registrados en las últimas semanas mantiene a Levante (19 puntos sobre el tercero) y Girona (siete de colchón) con las mayores garantías de ascenso.

Pero hay otros efectos. Los tropiezos en la zona alta permite el acercamiento de otros clubes que parecían descartados. El Valladolid, octavo, es el ejemplo más claro. Quedó tocado tras visitar el Pizjuán pero ahora se queda a cuatro puntos del sexto puesto, ocupado por el Oviedo. El domingo recibe al Numancia (sábado a las 18.00 horas) con el firme objetivo de seguir recortando distancia con el play-off. El Lugo, noveno, no pudo seguir el camino de los pucelanos y cayó en Vallecas. Sigue remando cinco puntos por debajo del Oviedo.

Entre los posibles candidatos inesperados en esta recta final sorprende el caso del Zaragoza, un conjunto construido en verano para pelear el ascenso y que ha atravesado una multitud de problemas: entre ellos la destitución de dos entrenadores, Milla y Agné. El conjunto maño está ahora mismo undécimo, con 46 puntos, aún lejos del play-off: a siete. El peligro viene al analizar la tendencia. El equipo dirigido ahora por Laínez acumula cinco partidos sin perder, gracias a tres victorias (0-3 en Elche, 1-0 al Mallorca y 0-1 en Miranda) y dos empates (1-1 contra el Valladolid y 2-2 frente al Almería. La Liga aún deja margen para sorpresas.