Christian Fernández es un futbolista que, ante el micrófono, suele salirse del tópico, que es lo que le pasa a quienes hablan claro. En ocho minutos de rueda de prensa, el lateral cántabro verbalizó ayer las dos realidades del Oviedo: la crisis de resultados que genera desconfianza y el impulso del buen partido ante el Zaragoza, que genera confianza.

"Hemos tenido demasiada suerte hasta el momento con lo mal que lo hemos estado haciendo en el último tramo de Liga. Se nos abre esta última oportunidad. Está en nuestras manos cogerla o no. Si queremos el play-off hay que ganar. No hay más", dijo el defensa, convencido como sus compañeros de poder conseguir el objetivo. "Si logramos los nueve puntos, jugaremos el play-off. Lo creo cien por cien. Tanto por arriba como por abajo se están jugando cosas. Quitando Reus y Sevilla Atlético el resto de equipos se está jugando un objetivo", señaló el lateral.

Christian pidió al oviedismo que tenga fe porque "estamos todos de la mano" para lograr el objetivo. "Con 6 puntos de 21, en otras circunstancias estaríamos totalmente desahuciados. Pero el fútbol tiene estas cosas para bien y para mal. Hay que coger esta oportunidad" porque de no ganar sería "el punto y final a la temporada". Christian dejó también una frase que resume un poco la igualdad de la categoría y la realidad del equipo: "El mayor enemigo del Oviedo es el Oviedo", afirmó.