Con Nando sucede una cosa curiosa: los entrenadores suelen reconocer sus habilidades, pero les cuesta encontrarle un sitio en el campo. Sucedió en el Córdoba de Oltra la temporada pasada, cuando actuó en las dos bandas aunque con cierta irregularidad: 20 partidos como titular y 15 como suplente. El pasado verano, en Valencia. Finalmente, Nando recaló en el Oviedo. Despuntó al principio en el extremo, su posición natural, fue utilizado después como agitador en las segundas partes y ahora se gana la vida como segundo punta. Su irrupción en el ataque azul es el último retoque de Hierro a un equipo que, con buenas sensaciones, sigue necesitando imperiosamente una victoria. El Arcángel ofrece una nueva oportunidad.

Y parece que será de nuevo con Nando como acompañante de Toché en el ataque. Así lo ha probado Hierro durante toda la semana en El Requexón. El valenciano se ha olvidado de la banda y ya piensa como delantero. Preguntado por la contribución del atacante, Hierro no dudó a la hora de lanzarle elogios: "Aporta velocidad, trabajo, capacidad de desborde, uno contra uno? Nos está ayudando mucho. En las salidas laterales le dejamos mano a mano con los centrales y ahí es hábil y poderoso. Es ahí donde salen a relucir sus virtudes". El técnico menciona un último dato que ayuda a entender su apuesta decidida por él: "Físicamente está fresco". La competición en su recta final no deja tiempo para tomar aire. Por eso, los que llevan menos kilómetros pero están metidos en la dinámica son una joya. Le sucede a Nando como también a Carlitos. El valenciano suma a estas alturas 1.231 minutos en la Liga, después de 12 partidos como titular y 17 como suplente. Hay 13 futbolistas en la plantilla que acumulan más minutos en la competición.

Su cuenta pendiente está en las jugadas decisivas. Sólo ha hecho un gol en la Liga (tras 12 disparos), la misma cifra que logró la temporada pasada en el Córdoba (le marcó precisamente al Oviedo en el Arcángel). También ha dado una asistencia.

Pero su aportación al juego azul va más allá de los números. Se ha visto en los dos últimos choques en los que ha formado una sociedad coordinada con Toché. El murciano se pega a los centrales y el valenciano trata de encontrar las rendijas. Hierro parece dispuesto a repetir la fórmula. Lesionado Michu, Linares aparece como alternativa para la punta de ataque.