El periodo vacacional es aprovechado por los futbolistas del Oviedo para desconectar y disfrutar del tiempo libre. El descanso es importante para relajar piernas y mente. Pero el parón no es para todos los futbolistas. Para los lesionados no existe el descanso total. Es el caso de Francisco Varela, lateral izquierdo azul, que en el pasado abril sufrió una fortuita lesión en la rodilla que le obligó ser sustituido en el Anxo Carro. El zaguero pasó después por el quirófano para someterse a una artroscopia y se perdió el final de la temporada. El andaluz realizó la primera parte de su recuperación en Sevilla, bajo la supervisión del doctor Santiago Pérez Hidalgo. La segunda fase en su puesta a punto se está llevando a cabo estos días en Oviedo. El trabajo se divide entre las indicaciones del cuerpo médico del conjunto azul y las labores sobre el campo, donde dirige el readaptador del club Ignacio Gonzalo. El objetivo es que el lateral regrese al trabajo el 10 de julio (fecha en la que está previsto que comience la pretemporada) al mismo ritmo que sus compañeros. El lateral es uno de los 14 futbolistas del Oviedo con contrato a partir del 30 de junio lo que no quiere decir que tenga asegurada su continuidad. El nuevo entrenador encargado de liderar el proyecto será el que decida sobre los jugadores que cuentan.