El entrenador del Oviedo salió satisfecho del encuentro ante el Lugo. El andaluz es consciente de que no fue un partido brillante ni demasiado atractivo, pero lo justificó: "La gente está con mucho trabajo, espesos. Lo positivo es la intensidad que tuvieron y la ayuda de las chavales", añadió.

Anquela aún no piensa en el primer encuentro de Liga ante el Rayo Vallecano. Para el técnico andaluz "aún quedan muchos partidos que jugar" hasta entonces. Tampoco considera que sea momento aún de hablar del derbi ante el Sporting, aunque considera "normal" que todo el mundo le pregunte por ello.

En lo que sí se mojó el de Jaén es en las necesidades que tiene ahora mismo la plantilla. "Aún falta gente por venir", dijo, y añadió después que la posición en la que tiene más carencias el equipo es en la de mediocentro, "la cocina del equipo". "En esa posición estamos muy justos, los chavales (por los canteranos) hacen lo que pueden y más; pero necesitamos incorporar gente en el centro del campo", añadió Anquela.

Lo que sí le gustó al entrenador del Oviedo fueron el gol y la actitud de Aarón Ñíguez: "Fue un gol bastante bonito, pero más que el gol me gustó la actitud, me gustan los extremos que encaran, que intentan cosas. No me vale que pisen la raya y que no intenten nada más", explicó. Del nuevo futbolista azul, el debutante Pucko, dijo que "sólo lleva tres días", aunque le reconoció el buen trabajo que realizó: "Lo he visto bien, vertical, es lo que nosotros queremos".

El jienense terminó con un mensaje optimista y con el convencimiento de que las cosas se están haciendo bien y pronto darán resultados: "Vamos por el buen camino; estamos haciendo un gran equipo".