El regreso del derbi hizo que, durante 90 minutos, algunas familias vistieran colores diferentes. Eso también forma parte de la magia de los duelos regionales. Fue el caso de la pareja formada por Diego Martínez Méndez y Cristina Gómez Hernández, sportinguista él y oviedista ella, que lucieron los colores de sus equipos para seguir un choque que dejó mejor sabor de boca entre los azules. La situación fue aún más llamativa para Borja Mori, rojiblanco, y Covadonga Vega, azul, que celebraron el sábado su matrimonio durante la disputa del choque en el Palacio del Marqués de Casa Estrada de Bimenes.