Anquela se toma un tiempo antes de contestar. "¿Qué tiene que hacer mi equipo para ganar?", repite la pregunta en alto, como si quisiera ganar tiempo; "Buena pregunta". Y, tras meditarla, lanza la respuesta: "El Oviedo tiene que ser el Oviedo". La frase, que parece una salida del técnico para no meterse en detalles, tiene su miga. Solo se ha disputado un mes de competición y Anquela tiene muy claro el Oviedo que quiere ver sobre el césped. También lo tienen claro sus futbolistas. El equipo de Anquela es intenso, valiente, muerde al rival y no especula. Podrán salirle mejor o peor las cosas, la estética de su propuesta puede admitir el debate, pero la identidad está marcada desde el primer día. De ahí que Anquela diga que el Oviedo deba ser el Oviedo. El que sigue sus indicaciones, se entiende. Ante la amenaza del Cádiz, el entrenador quiere que su equipo mantenga la esencia.

Y esa esencia es la que se trabaja día a día en El Requexón. "El camino que hay que seguir es el que llevamos hecho desde el primer día. Algunas veces nos equivocamos, o tenemos momentos en los que no hemos estado finos, pero siempre debemos mantener la intensidad y la misma manera de afrontar los partidos", explica Anquela antes de apostillar: "Lo que hace falta es que ese trabajo se vaya sosteniendo con puntos".

Toca sumar. La competición aún da sus primeros pasos y la urgencia no es buena consejera, pero el Oviedo quiere ir asentándose en los puestos de cabeza. Arriba, siempre es más sencillo mejorar. En los planes del entrenador están los tres puntos de mañana ante el Cádiz, aunque la meta no parece sencilla de lograr. Los de Álvaro Cervera llegan a Asturias con la condición de líder de la categoría. El mejor refrendo posible a un inicio convincente: 10 puntos, después de tres victorias y un empate.

En cada respuesta de la sala de prensa de El Requexón se percibe que a Anquela le seduce la propuesta de los de Cervera: "Em Segunda es difícil ganar a cualquiera porque todos tenemos un nivel parejo, pero al Cádiz cuesta aún más ganar. Ahora mismo es el mejor. Es el líder. Es un equipo que lo tiene claro, sabe a lo que juega, y lo hace muy bien", Y sigue con sus advertencias: "Ha cambiado algunos futbolistas respecto a la temporada pasada por necesidades del guion pero mantiene su espíritu. El año pasado estuvo ahí, no subió por el factor campo pero podría haberlo hecho". La disección del rival sigue con su goleador, David Barral: "Siempre ha hecho goles. Le recuerdo en el Madri Castilla y ya marcaba. Al que es bueno no se le olvida hacer goles".

Queda claro, después de todo lo expuesto, que a Anquela le gusta el Cádiz. Le considera uno de los equipos más completos de la categoría. Podría deducirse incluso que el de los gaditanos es un buen ejemplo a seguir para el jienense. Pero el técnico también cuenta con armas para contrarrestar el peligro andaluz.

A pesar de las bajas, el Oviedo ha demostrado en este inicio de campeonato que está preparado para pelear. El último ejemplo es reciente: empate merecido en El Molinón. "Tenemos que ser nosotros: competitivos, sabiendo jugar el partido. Y con paciencia. Creo que paciencia es la palabra clave para afrontar el partido anete el Cádiz", cierra Anquela su intervención.