México, golpeado terriblemente por el salvaje terremoto que dejó tiritando al mundo, tendrá hoy en España otro recuerdo especial. En el Carlos Belmonte de Albacete, a 9.267 kilómetros del país azteca, los futbolistas del Oviedo saltarán al campo con una camiseta especial: al lado del escudo, en ese lugar donde se abre paso fuerte el sentimiento, la zamarra lucirá un mensaje de apoyo al país que no sólo vio nacer al dueño del club sino que acoge a un montón de oviedistas que llevan a México en el corazón.

Las zamarras azules lucirán en el pecho la bandera mexicana, la firma del partido de esta tarde (Albacete Balompié-Real Oviedo, 24 de septiembre 2017) y un lema que todos, aquí y allí, sienten: "Fuerza México". Después, las camisetas se subastarán y los fondos se destinarán a los afectados por el desgraciado seísmo, que ha dejado más de 200 muertos, un nudo en el estómago y un país tocado que, en una ejemplar exhibición de solidaridad, se ha dado fuerte la mano para volver a levantarse y seguir. La tragedia se sintió de forma especial en un club tan vinculado a México como el Oviedo. Los mensajes de solidaridad corrieron como la pólvora esta semana, de Oviedo a Ciudad de México, y las imágenes de condolencia invadieron los perfiles de las redes sociales y del Whatsapp. "Ya no duermes a gusto ni una sola noche", explicaba ayer desde Ciudad de México Roberto Toral, exfutbolista formado en el Oviedo que jugó, entre otros, en el Langreo, Marino, Lealtad o Avilés. "Llevamos días de locura. Hoy (por ayer) volvió a temblar otra vez", aseguró. Robi sigue jugando al fútbol en una liga amateur. Su equipo, juega con equipaciones del Oviedo.