Aarón Ñíguez participó de forma decisiva en el primer gol del choque, el que abrió la lata y permitió a los azules jugar con más tranquilidad. Su centro desde la esquina fue cabeceado por Guardiola contra su propia portería. "Hemos sabido madurar el partido aunque a veces nos ha faltado profundidad. Una vez más, el partido se decanta por el balón parado", indicó el centrocampista al término del choque que hizo regresar al equipo a la senda de la victoria. Esos tres puntos sumados suponen un punto de apoyo. "Era un partido complicado y la victoria es importante ante un gran rival aunque no pase por su mejor momento", señaló Ñíguez. "Lo más difícil es hacer un ataque en estático y ante un rival que ha juntado las dos líneas de cuatro y que quería jugar con nuestra ansiedad, ponernos nerviosos".