El Real Oviedo vive un momento dulce. Sigue encadenando buenos partidos y este domingo alargó su racha tras imponerse al Osasuna (1-0) en un partido de coraje y garra, en el que supo adaptarse mucho mejor que su rival al nefasto estado del césped del Carlos Tartiere por las intensas lluvias caídas a lo largo del día.

Tras los tres puntos cosechados ante Osasuna, el Oviedo se queda a las puertas de los puestos de promoción, empatado a puntos con el último equipo que ocupa estas posiciones privilegiadas: el Rayo Vallecano. Igualmente se sitúa a cinco puntos de su eterno rival, el Real Sporting, al que ha recortado trece puntos en apenas dos meses: en ese tiempo los rojiblancos, inmersos en una crisis de juego, han pasado de sacar ocho puntos a los azules a estar cinco por debajo de ellos.

La gran racha oviedista ha llenado además de euforia a su afición, que despidió al equipo, tras la victoria ante Osasuna en el Carlos Tartiere, con el famoso grito vikingo, puesto de moda por la selección islandesa de Diegui Johannesson, precisamente el jugador que marcó el gol que significó la victoria oviedista ante los rojillos.

La afición despide al Oviedo con el grito vikingo tras ganar a Osasuna

La afición despide al Oviedo con el grito vikingo tras ganar a Osasuna