El mercado invernal no se advierte esta vez, a diferencia del año pasado, como un remedio obligatorio para dar un impulso al equipo. En el club azul se toman el periodo de fichajes con tranquilidad. De hecho, Anquela, contento con el rendimiento de la plantilla, todavía no ha hecho ninguna petición concreta. La dirección deportiva azul, no obstante, peina el mercado desde hace tiempo. Las prioridades a día de hoy son la llegada de un delantero y, sobre todo, el capítulo de salidas. "Si va a venir gente, otra tiene que salir", repitió ayer Anquela. La idea es que se marche más de un jugador. "Hay futbolistas jóvenes que tienen que jugar. Si aquí no tienen sitio... yo buscaría una solución", dijo ayer muy claro el técnico. Pucko y Owusu encajan en este perfil por su juventud y por la falta de minutos. También Varela. Valentini, más veterano, es otro candidato. El capítulo de bajas, sin embargo, no es fácil. Hay operaciones complejas por la letra pequeña de cada acuerdo. Owusu, por ejemplo, está cedido por el Leganés. Pucko firmó dos años.

La salida de futbolistas libera carga salarial y da más capacidad para afrontar adquisiciones. La prioridad es un delantero, sin descartar al menos otro refuerzo. Con el punta, el Oviedo quiere ser cauto y ver también la evolución de Toché (35 años en 10 días) que se recupera de una lesión de rodilla. Un candidato que encajaría sería el exoviedista Koné, sin minutos en el Leganés, en el radar del club hace tiempo. Koné está dispuesto a jugar en Segunda y ya le han vinculado a equipos como el Zaragoza. El Oviedo, no obstante, no tiene ni las prisas ni las urgencias del año pasado y no hará nada hasta hablar con Anquela, cita prevista para los próximos días. Sabe que volverá Fabbrini y que el técnico cuenta también con la cantera, como ha demostrado con Viti o Steven (que ya han debutado) y Edu Cortina.