Para Saúl Berjón la banda izquierda solo es una excusa, un refugio desde el que intervenir en el juego. Allí, en el flanco izquierdo, el atacante instala su campamento base para, a base de diagonales, influir decisivamente en el juego del equipo. Cuando está tocado por la varita, el juego del Oviedo se inclina hacia su lado. Cuando no está tan fino, puede aparecer con un destello. En ambos casos, el balón parado es otro escenario en el que reclama su protagonismo. Sus diferentes versiones convierten a Saúl Berjón en el mejor socio de todos en este Oviedo: con su asistencia en el gol de Carlos Hernández en Vallecas se consolida como el segundo mejor asistente de la competición, con 8 pases de gol.

Solo le supera Embarba, el centrocampista del Rayo que mantiene su liderato -9 asistencias gracias a un centro medido al Chori Domínguez en el primer gol de los madrileños. Berjón contestó en el segundo acto con otro córner milimétrico en su octava asistencia de la temporada. La mayoría, a balón parado, una de las señas de identidad de este Oviedo. Iguala con 8 asistencias Emi Buendía, de la Cultural, otro jugador de perfil claramente ofensivo.

La influencia de Berjón en el juego ofensivo de los de Anquela se confirma cuando se echa un ojo a la estadística. Además de pelear el ránking de asistentes, comanda la de pases peligrosos, una estadística que contabiliza los servicios que acaban en gol o en remate de un compañero. Berjón ha dado hasta la fecha 56 pases peligrosos. Le siguen en la tabla Pedro, del Granada, con 53, y Buendía, con 46.

La clasificación de asistencias y de pases peligrosos no son las únicas por la que pelea Saúl Berjón. El ovetense está destacando como uno de los mejores centradores de la competición. Es el tercer futbolista de Segunda que más centros pone, con 132, solo por detrás de Embarba, 177, y Pedro, 169. También está en el podio de centros buenos: ha hecho 37. Le superan Pedro, 51, y Embarba, 44.

Con el Oviedo asentado en un sistema que le da firmeza, el foco ofensivo queda en manos de los genios. Saúl Berjón es el mejor representante de la vertiente más creativa de los de Anquela.