En esta ocasión, el partidillo de los jueves tenía un interés especial. Se notaba en la presencia de público, más del habitual. También en la sala de prensa, atentos los medios a los detalles que pudieran quedar al descubierto. Ésta es una semana diferente. Anquela trabaja en El Requexón en una doble vertiente: tratar de levantar la moral del grupo en la racha más preocupante de la temporada y reconstruir un equipo asolado por las bajas en la zona de ataque. Sin Toché y Linares, sancionados, ni Olmes, lesionados, la semana de trabajo oferta un puesto en el área. Aarón Ñíguez oposita al puesto junto al canterano Steven en el sistema de tres centrales, que no varía. Ésa es otra de las conclusiones que pueden sacarse del ensayo de ayer (que finalizó con 1-0 para los mayores ante un intenso y disciplinado Vetusta): el 5-2-3 instaurado por Anquela desde hace meses no se toca.

El mal momento del equipo y la baja forma de algunas piezas importantes en el sistema parecían sugerir que había llegado el momento del cambio. No será ante el Granada, si se atiende a las pruebas de ayer. Anquela dispuso el sistema habitual en los cuatro tiempos en los que dividió el partidillo. En los dos primeros periodos, el jienense empleó sobre el terreno de juego a Juan Carlos; Cotugno, Johannesson, Verdés, Varela, Mossa; Mariga, Rocha; Linares, Aarón y Berjón. En el segundo periodo, Toché relevó a Linares, ubicándose como el aragonés en la banda derecha.

La puesta en escena inicial sirvió para ver que Aarón Ñíguez se perfila como el más serio candidato a remplazar a los dos delanteros habituales en la punta de ataque. Al margen de las opciones mostradas por el filial, Steven como representante, Anquela se verá obligado a reubicar a uno de sus hombres como ariete. Aarón es el elegido. El ilicitano actuó en punta con movilidad por todo el frente de ataque. Evitó el cuerpo a cuerpo en los balones aéreos y busco con desmarques de ruptura la espalda de los defensas del filial. Así llegó el único gol del partidillo, en los primeros compases: Berjón filtró al espacio y Aarón controló en carrera y batió con calidad a Gorka.

Los dos últimos tiempos sirvieron para confirmar que el 5-2-3 es la única alternativa que maneja Anquela. El sistema no varió con el cambio de cromos. Jugó entonces el Oviedo con Alfonso; Viti, Carlos Hernández, Valentini, Christian, Pucko; Mariga, Hidi; Yeboah, Steven y Fabbrini. En la segunda parte el área fue para Steven, otra opción para la delantera de cara al choque del domingo. Con el canterano, Anquela gana un futbolista de área, que conoce las claves del oficio. Las dudas vienen en la experiencia: su participación en el primer equipo se reduce a dos encuentros, en Copa ante el Numancia y en Valladolid en la Liga.

La otra duda reside en encontrar un sustituto para Johannesson, también sancionado. La prueba no dio pistas: Cotugno y Viti se repartieron cada uno de los tiempos ante el filial.