Rocha reconoció en la vuelta al trabajo del Oviedo que el sábado se les escaparon dos puntos en el campo del Córdoba que estuvieron muy cerca de haber sumado, pero que se tuvieron que conformar con el empate (1-1). Un lamento que no impide que el extremeño vea una parte positiva: "Recuperamos la buena imagen que teníamos del equipo".

El Oviedo se ejercitó esta mañana en el Estadio Universitario, en San Gregorio, por causa de las inundaciones que le han impedido hacerlo en El Requexón, como suele ser habitual. Una sesión en la que los titulares en el encuentro del sábado realizaron un entrenamiento regenerativo mientras que el resto del equipo continuó ejercitándose con normalidad.

Rocha, que no podrá jugar el siguiente encuentro del Oviedo, el sábado (18 horas) en el Tartiere frente al Alcorcón, por la acumulación de cinco tarjetas amarillas explicaba que se han vuelto de Córdoba con buenas sensaciones: "Volvemos con sabor agridulce porque teníamos la victoria en la mano, pero reforzados porque hemos vuelto a demostrar que cuando el equipo compite somos difíciles de ganar", añadía. Añadía el centrocampista azul que hicieron todo lo necesario para llevarse el duelo pero que no fue posible por detalles: "Tuvimos opciones para haber matado el partido cuando íbamos con el marcador a favor, pero somos conscientes de que si mantenemos ese nivel vamos a hacer un buen final de competición".

Tampoco considera que el empate en el Nuevo Arcángel sea un mal resultado, puesto que, dice Rocha "cada punto es oro".