Las marcas del Real Oviedo ya tienen un nuevo valor: 4,8 millones de euros, 1,8 más que en 2009. Así lo estima su actual propietario, el Ayuntamiento de la ciudad, que el pasado martes recibió la tasación encargada hace un mes a una empresa especializada con el objetivo de actualizar su valor para iniciar el proceso de su reventa al club. El Ayuntamiento pagó por ellas al club tres millones de euros en 2009, cuando las compró. Entonces el equipo estaba fuera del fútbol profesional y tenía su futuro en entredicho. Ahora, nueve años después, con el club saneado por Carso, asentado en Segunda y con el objetivo a corto plazo puesto en subir a Primera, las marcas se han revalorizado un 60%, según la nueva tasación, conocida ayer por LA NUEVA ESPAÑA a través de distintas fuentes municipales.
El gobierno local, en principio, está dispuesto a devolvérselas al club partiendo de este nuevo valor, aunque no vería con malos ojos una negociación encaminada a facilitar el proceso. El club, que tiene como máxima prioridad recuperarlas, ya advirtió en la última reunión en el Ayuntamiento, celebrada hace poco más de un mes, que no pagaría cifras que salieran de su previsión y que, en todo caso, harían su propia valoración, todavía desconocida. Un día después de esa cita, la vicealcaldesa Ana Taboada (Somos) prometió públicamente que el Ayuntamiento "no haría negocio" con el Oviedo y recordó que fue el PP en 2003 quien intervino en el club "con el desastre que ello supuso". Desde el año 2009, el Oviedo usa las marcas pagando un alquiler anual de 60.000 euros.
La tasación de las marcas encargada por el tripartito (Somos, PSOE e IU) llegó a los despachos municipales el pasado martes, a última hora de la tarde y a través de correo electrónico, pocas horas después de que el Oviedo desvelara que había acabado la temporada con el número de abonados más alto de su historia (20.796) y también con el capital social más alto (más de 18 millones de euros), cifra esta última ya conocida desde la semana pasada. Los documentos, sin embargo, tienen fecha del pasado viernes, 1 de junio. En ellos, la empresa que realizó la tasación, Dungarvan, desgrana los criterios que le han llevado a concluir la revalorización del 60% de las marcas en nueve años. Cita varios: que es un club histórico con 38 temporadas en Primera, que ocupa un puesto entre los quince clubes más importantes de España, que tiene un número creciente de abonados, que tiene una "alta afluencia" de público en su estadio, que tiene una buena generación de ingresos por camisetas? También cita lo que considera "activos intangibles", que tienen que ver con el caché histórico del Oviedo, su rentabilidad futura y la "posibilidad de evolución del equipo" para "asentarse" en Primera. También reconoce la buena línea de la entidad desde que Carso entró en el capital del club (noviembre de 2012). "La mejora de la situación del Real Oviedo en los últimos años y la tendencia sostenida en el tiempo de esta línea nos permite llegar a un mejor resultado del considerado hace nueve años", concluye el citado informe.
La marca Real Oviedo lleva años en tendencia alcista. De hecho, en las últimas cuentas de la entidad facilitadas el pasado mes de diciembre consta que las cifras por venta de productos en las tiendas oficiales superó el curso pasado, por primera vez, el millón de euros. Esta partida lleva cuatro temporadas consecutivas en aumento. El club, además, baraja proyectos de expansión de la marca fuera de España, al Reino Unido o a México.
La nueva tasación abre un nuevo escenario entre dos instituciones que chocan día sí y día también y que mantienen una tensa relación, de respeto pero fría, de mutua desconfianza por más que las dos partes se empeñen, tras cada reunión en el Ayuntamiento, en vender públicamente lo contrario. El Oviedo quiere de vuelta las marcas lo antes posible y el Ayuntamiento, que es el cuarto máximo accionista del club (contando los nuevos inversores que entraron recientemente de la mano de Carso), no está dispuesto a regalarlas porque, recuerdan, fueron compradas "con el dinero de todos".
El Ayuntamiento siempre vio con con buenos ojos que se mantenga el método actual: el convenio de alquiler para que el Oviedo pueda usarlas, pero el club, además de que tiene como prioridad recuperarlas en propiedad, no está dispuesto a pagar los intereses planeados. Otra de las posibilidades planteadas en su día fue la posibilidad de una especie de alquiler con derecho a compra, es decir, que el Ayuntamiento descuente lo pagado durante todos estos años por el Oviedo en una futura compra, algo que desde el Consistorio se desechó por considerarlo "ilegal".
En la última cita entre las dos partes, el alcalde de la ciudad, el socialista Wenceslao López, fue claro: "Hay una voluntad por parte del Oviedo de recuperarlas y vamos a tratar de facilitar ese proceso, respetando la legislación pero facilitando que vuelvan a su propietario original, que es el Real Oviedo y es quien sabe gestionarlas". El presidente azul, Jorge Menéndez Vallina, también se manifestó entonces: "Nuestro interés es recomprar, no pagar un alquiler. Por parte del Ayuntamiento se ha encargado una tasación y veremos en qué queda". La tasación ya está lista: 4,8 millones.
