Pola de Siero,

Franco TORRE

La dificultad en el acceso a la vivienda de los jóvenes es una de los principales preocupaciones entre los españoles. La pasada semana este periódico reveló que sendos grupos de viviendas protegidas para jóvenes en Pola y Lugones se iban a entregar con retraso debido a una serie de problemas apreciados en la distribución de los bloques.

En este sentido, el mayor problema se encuentra localizado en las viviendas ubicadas en la avenida de Gijón de Pola de Siero, en la finca del antiguo hospitalillo de la localidad. El grupo, de 17 viviendas, debería estar constituido por pisos de una, dos y tres habitaciones.

En concreto, deberá haber tres viviendas de tres dormitorios, aunque algún tipo de error en la ejecución u otra causa aún no aclarada ha provocado que ninguna de las viviendas tenga más de dos habitaciones.

Esta situación ha derivado en el retraso en la entrega de llaves a los propietarios, algo que se ha repetido en otro grupo de 31 viviendas situadas en la calle Luis Braille de Lugones, aunque en este caso el problema es de otra índole, ya que debería haber dos viviendas adaptadas para discapacitados, lo que también ha provocado que haya que iniciar otra obra.

Estos dos contratiempos suponen un serio varapalo para la política en materia de vivienda del Ayuntamiento de Siero, que había iniciado en colaboración con el Principado un ambicioso plan de desarrollo de las viviendas protegidas.

Ante la polémica suscitada por este asunto, este periódico se ha trasladado a la capital del concejo para consultar a los vecinos qué opinan de la situación creada en Pola de Siero y Lugones a raíz de estos problemas de ejecución en los pisos públicos, así como por la política del Ayuntamiento en materia de vivienda protegida para jóvenes.